Hagamos un punto y aparte

El listo de Feijóo sale a hablar del 'andalú' y lo que hay detrás es disimular por el ataque al catalán de su gobierno balear, con Vox

Feijóo en un mitin para las elecciones del 23J en Cádiz.

¿El andalú? Me conformo con hablar del gaditano, que andaluces hay muchos y sé que Feijóo no va a salir a ninguna parte pudiendo describir esa diversidad que los andaluces tienen a la hora de vivir su cotidiano. El gaditano, entonces. Lo hablan los gaditanos, sirve para pescar, para vender la pesca, para freírla, para comerla. Sirve para te digan en una radio o en una televisión que hables en castellano, porque a Feijóo le sirve el andalú para decir en Cataluña cosas de las que ni sabe ni entiende. Lo hermoso del gaditano es que es llegar a Cadi y todo el mundo habla gaditano. A mí me envuelve el alma y me hace sonreír; me cambia incluso mi forma de hablar, después de tantos años. No creo que haya cosa más grande.

El ministro. En verdad, un chisgarabís metido en camisa de once varas de incontinencia verbal, que se hubiera ganado su cese si no se hubiera metido Milei, como siempre, en un jardín demasiado grande para él. Pero claro, Feijóo tenía que meter también la cuchara, y Abascal, sin duda, porque es su invitado para este miércoles. A Feijóo le molesta que el ministro diga lo que dijera de Milei, pero se encuentra cómodo con sus interminables disparates sobre el mismo presidente español. Es ocioso hacerle comprender a su hinchada, y a la de Vox cosas del comportamiento entre vecinos, al menos los españoles somos vecinos, así que Abascal y Feijóo insisten en apoyar las barbaridades dichas por Milei contra el presidente de España, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid. En eso, también en eso, vemos que Abascal, Feijóo y Milei son dos caras de la misma moneda y el canto. Por cierto, si las elecciones europeas son en junio, ¿por qué Vox invita a Milei para las europeas el jueves antes de las catalanas? Seguramente esperan que el histrionismo del león azuce la bronca en Cataluña; otra explicación no se comprende.

María Muñoz Ladrón de Guevara, de 87 años, es expulsada de su casa para que el turisteo siga ocupando los espacios de vida de nuestras ciudades y ese turisteo barato, berreta y sin alma sida destruyendo la vida íntima de nuestros lugares. Se puede visitar todo, y se puede ser discreto y no meterse en la cocina de nadie en nombre de un derecho que no existe. ¿Eres turista? Pues ve con prudencia y no le quites el techo a nadie por tu fin de semana largo. Lo que sí existe es el derecho a vivir en una casa, en tu casa, entre tus vecinos. Hablo del derecho humano a seguir siendo, todos, considerados seres humanos, porque el modelo de turismo que contemplamos con espanto es deshumanizador.

El listo de Feijóo sale a hablar del andalú y lo que hay detrás es disimular por el ataque al catalán de su gobierno balear, con Vox. Un ataque que desmantela el uso del catalán en las Islas Baleares para que solo se hable castellano de Castilla; como que en la televisión andaluza haya que hablar vallisoletano, no se sabe si con laísmo incluido o no.

Hagamos un punto y aparte. La estrategia es saturarnos para que nos cansemos y les dejemos hacer a ellos lo que les dé la gana. Saturarnos para que les digamos a todo que sí. No sé si el punto y aparte debe ser dejarlos hacer lo que ellos quieran. Sabemos que cuando nos plantamos se acaba la burla. Plantémonos, entonces.