Acaba la pretemporada y empieza la competición. Más o menos en esa clave se ha convocado hace unos días una reunión interna del ejecutivo del PP en el Ayuntamiento de Jerez donde la alcaldesa y líder del equipo, María José García-Pelayo, ha dado algunas directrices muy claras y en línea con el discurso que ha venido manteniendo desde que reconquistó la Alcaldía en junio pasado: cero broncas y refriegas partidistas, y rematar como se pueda 2023 —con toda la gestión buena, regular, mala y pésima heredada del anterior gobierno del PSOE— para encarar un 2024 donde ya todo se espera que esté cimentado para construir el nuevo modelo que quiere para la ciudad.
Según ha informado en una nota el Ayuntamiento, García-Pelayo ha subrayado ante su equipo "el alto grado de trabajo de este gobierno, que no sólo ha tenido que desatascar o corregir cuestiones que no estaban bien hechas con anterioridad a su llegada, sino que ha tenido la fortaleza de, en pleno verano, haber mantenido encuentros con la práctica totalidad de los colectivos de Jerez de cara a poder iniciar una senda de trabajo conjunto entre el Gobierno y la ciudad, entre el Ayuntamiento y otras administraciones". Sin embargo, esto es lo que se ha contado oficialmente de una intensa reunión que no es más que una puesta en común del trabajo conjunto constante que se está siguiendo.
Sobre lo primero, fuentes del gobierno sostienen que no solo no han querido —ni quieren— entrar en debates estériles con la oposición —en alusión al PSOE; el resto de la oposición de momento no existe—, sino que una de las cuestiones que han detectado es que la ciudadanía lo que pide es gestión y mirar al frente, sin enredos partidistas. "Nos piden que ni entremos cuando nos meten en broncas tan absurdas como las de la plaza San Juan, que es una obra que el PSOE debió acabar en marzo como se comprometió y que dejeron empantanada", aseguran.
Visitas y encuentros con 'toda' la ciudad... hasta en ola de calor
Sobre lo segundo, Pelayo pidió barrer toda la ciudad durante estos primeros y ha logrado en tiempo récord —y con ola de calor— tomar el pulso a la gran mayoría de colectivos, organizaciones y asociaciones de la ciudad, comprometiéndose a ampliar el espectro de forma ya más pormenorizada, y con encuentro más puntuales, desde ya. En este sentido, se han dado casos de visitas y encuentros en plena ola de calor o, como esta misma semana, con una reunión "hasta las tantas" para analizar un proyecto de ciudad muy importante.
Lo que más preocupa de todo lo que se está analizando son ciertos desfases presupuestarios que afectan a cuestiones como Acción Social, o grandes cuestiones de contratos como el recurso doble presentado contra la adjudicación de Las Calandrias. Igualmente, denuncian sus colaboradores que había partidas "esquilmadas" y otros asuntos que ya estaban "atados y bien atados" —como las programaciones del principal equipamiento cultural de la ciudad, el Teatro Villamarta— en los que a estas alturas del año era imposible girar el rumbo.
Por lo demás, la regidora jerezana ha puesto de relieve cómo estos primeros meses han servido "para mostrar a los jerezanos que las cosas, efectivamente, se podían hacer de otra manera y que este gobierno ha venido a servir, a trabajar y a mejorar una ciudad tan importante como Jerez". "A la gente —aseguran fuentes de su gobierno a lavozdelsur.es— le sorprende que ahora haya tanta celeridad para resolver cuestiones de un día para otro". Del mismo modo, también señalan el intenso trabajo de motivación que se está haciendo con el conjunto de los empleados públicos municipales, pendientes del fin del proceso de estabilización de la plantilla.
Durante la sesion de trabajo del gobierno municipal, María José García-Pelayo, ha insistido en que "el empleo, la seguridad, la limpieza y los servicios públicos eran, son y serán la prioridad y que, por tanto, todas las delegaciones municipales estarán volcadas en lograr estos objetivos irrenunciables". De igual modo, ha recalcado su idea de "pensar muy bien todo, los pros y los contras de las grandes decisiones, para no precipitarse". "Si no se anuncia qué haremos con Riquelme hasta dentro de un año, pues no se anuncia, pero mejor no vender más humo", es otra de las grandes consignas. La orden es que no haya titulares del tipo Zahav o la fábrica de zapatos, o planes directores vacíos de contenido.
"En el Museo de Lola, por ejemplo, no pueden llegar autobuses porque luego no pueden salir de la ratonera de plaza Belén, hay que ver cómo acercar a personas mayores que llegan de otros municipios para hacer la visita y ni pueden llegar a la puerta del espacio. A eso se refiere la alcaldesa, a ver las cosas con todo su contexto y con todos los posibles obstáculos para no precipitarnos". Frenar el cutrerío y la improvisación que, a menudo, se veía en la etapa anterior es una de las grandes obsesiones.
Asimismo, el gobierno de Jerez ha definido la hoja de ruta de proyectos importantes a poner en marcha en la ciudad, tanto los que parten de la iniciativa puramente municipal como cuantos están vinculados a la estrecha colaboración que existe con el Gobierno de Juanma Moreno en la Junta de Andalucía. En este sentido, destacan las mismas fuentes "estamos realmente encantados con cómo está tratando la Junta a Jerez, el empujón de la Ciudad de la Justicia del otro día —estuvo la pasada semana José Antonio Nieto en Jerez para anunciarlo— ni lo esperábamos".
"Tal como dijimos a los jerezanos —se asegura en la referida nota—, en este comienzo del nuevo gobierno es fundamental sentar las bases de la ciudad que queremos para los próximos años. Hemos dado ya importantes pasos pero la ciudad necesita de una planificación seria, coordinada y consensuada que permita avanzar, lo más rápido posible, en visualizar el modelo de ciudad al que aspiramos mediante un plan estratégico, el Plan Jerez, que los ciudadanos apoyaron de forma muy mayoritaria".