La flamante alcaldesa, María José García-Pelayo, ha decidido plantar cara al crimen organizado que campa a sus anchas en la muy noble y muy leal ciudad de Jerez de la Fra. Desde ahora hablamos de ¿Eliot Pelayo?, ¿Pelayo Ness? Elijan ustedes… tal vez la segunda, sí: Pelayo Ness.
La ocupación, la prostitución, el botellón (y probablemente algunas más cosas terminadas en ‘on’), además de las carreras de motos en la zona sur, tienen sus días contados. Alguien ha llegado a la ciudad, señoras y señores malos: Pelayo Ness que, por supuesto, está acompañada por sus Intocables.
Pelayo Ness va de frente contra “las mafias de la ocupación ilegal de viviendas”, es el titular que, con alguna variante, ha aparecido hasta dos veces en distintos medios de comunicación, antes y después de la celebración de la Junta Local de Seguridad. Solo cabe aplaudir desde este mismo instante y desde estas mismas líneas dicha iniciativa, lo que pasa es que se trata de unas declaraciones que acaban creando cierta desazón: si existen, textualmente, “mafias de la ocupación ilegal de viviendas”… ¿Eso significa que también hay mafias de la ocupación legal de viviendas? ¿Existiría, incluso sin necesidad de la mediación de ninguna mafia, una ocupación legal de viviendas, así, rozando la figura jurídica? ¿Si te acompaña, no sé, pongamos, por caso, un registrador de la propiedad o no digamos un notario, la ocupación sería legal de forma automática?
Son preguntas retóricas, por supuesto. Dejémoslo en que ha sido un pequeño lapsus fruto del apasionamiento con que la también senadora electa vive su tercer paso por la alcaldía de Jerez de la Fra.
La prostitución “a la vista de todos” (la otra, la de puertas para adentro, se ve que da más igual, pero ojo, esta no es una sección de carácter moral, ni mucho menos), el botellón y las carreras –estas sí, forzosamente ilegales si se habla del circuito para fuera- son los otros temas en que Pelayo Ness y sus Intocables van a centrar su lucha contra el crimen en la nueva Babilonia en que se ha convertido Jerez de la Fra, con un crecimiento del delito de un 22% respecto al año anterior, que se dice pronto.
Pero esto se va a acabar. La alcaldesa quiere a la policía en la calle como medida disuasoria. A toda. Por eso, entre otras razones, ha desmantelado al Grupo Beta de la Policía Local, grupo de información del cuerpo que habitualmente iba de paisano recabando información por aquí, por acá y por acullá. Se acabó. Todos los policías uniformados de ese tono de azul, el ‘azul servicio público’, a la calle, no solo que trabajen, que se vea también que trabajan.
Sin los Beta, será la propia Pelayo Ness, al frente de sus Intocables, la que dirija las operaciones contra la ocupación (ilegal), la prostitución, el botellón y las carreras… no sabemos si tiene algo previsto contra el juego: no se descarta que pueda haber una redada incluso en el sótano de este cronista, que de vez en cuando se monta una timba, pero antes convendría avisar, no vaya a estar presente y dándole al póker alguno de sus nuevos Intocables... Bueno, no demos ideas.
Les decía que será la propia alcaldesa la que dirija las operaciones a través de la información que le dejan los ciudadanos, unos anónimos, otros no tanto, en su teléfono, que sigue siendo el mismo que cuando era candidata. “Señora Ness, he visto una chavala ligerísima de ropa y mascando chicle en la avenida de México; haga algo, por favor”. “Señora Pelayo, han ocupado una casa en el casco histórico. Eso sí, no sé si la ocupación es legal o no, eso ya que vayan a comprobarlo sus Intocables”. “María José, mira, que hay cien niñatos bebiendo en la Alameda… Yo es que lo veo cosa casi de los antidisturbios, pero no te quedan, ¿no?”, son algunos de los mensajes de voz que todas las semanas atiende personalmente la alcaldesa y que le ayudan a hacerse una idea de la depravación a la que ha llegado Jerez de la Fra.
Pero esto no queda aquí. Ha surgido un enemigo nuevo: ¡la plaga de moscas! Otra señal bíblica, sin duda. Pero no, amigos, qué va, amigas, no teman: este es un trabajo específico para el Intocable DDT Espinar, el concejal del ramo (desde ahora con un apodo así como de boxeador de los 80), que va a acabar con la plaga y de paso va a enviar al baúl para siempre aquella antigua frase de que “en Jerez de la Fra, en verano, solo hay moscas”.
Ha llegado alguien a la ciudad y le va a dar la vuelta al 22%: ¡Pelayo Ness... y sus Intocables!