Me gusta imaginar a la imposible pareja, a María y a Kinsey de la mano. Cada uno y por su lado, sin ni mirarse siquiera. María, a la sombra de los pinos; Kinsey, agarraíto a la Reja
El problema a resolver no se resume en un solo verbo ni en la prohibición de estar con profesionales, sino atendiendo a las circunstancias que hacen de nuestro placer posible incordio para quien se ve en la obligación de alquilar su cuerpo solo por sobrevivir.
No deja de ser curioso, siendo el Mensaje de Cristo la Resurrección y su promesa la Vida Eterna, que hayan quedado sus seguidores más ortodoxos prendidos sólo de sus suplicios
He oído estos días a sesudos informadores de TV cómo compraban sin regateo argumentos de Sanedrín y proclamaban a Cristo, Rey de los Judíos, sin merma de que el encausado dijese en su defensa que su Reino no es de este mundo
El hombre, Alexander Dugin, parió en 2009 lo que dio en llamar 'Cuarta Teoría Política', superadora dice él de comunismo, fascismo y, por supuestísimo, del liberalismo
Entretanto, autónomos como son, voxean consignas de Bannon, suman sus justas reivindicaciones al batiburrillo del todo vale, o se suman a la consigna maoista del cuanto peor, mejor