Hace unos días los sindicatos sanitarios denunciaban el colapso en el Hospital de Puerto Real por falta de camas para los pacientes que se quedan en muchas ocasiones durante días a la espera de ingreso. Mientras tanto pasan la noche en sillones o en camas de observación que no puede ser ocupadas por nuevos pacientes críticos. A ello se une la incomodidad de los familiares que no tienen una simple sala de espera donde permanecer esperando noticias sobre su familiar a la intemperie.
También esta semana hemos conocido el caso de Sergio, un joven andaluz, que denunciaba en redes el trato indignante que recibía su padre enfermo de cáncer derivado a una clínica privada desde la Sanidad Pública y al que se le canceló un tac para ahorrarse el coste de la prueba.
Este fin de semana además hemos sabido de otro caso de saturación hospitalaria. Ha sido el Virgen del Rocío, donde un paciente que ha permanecido más de 6 horas de espera compartía imágenes en redes en las que se veían enfermos en camas y sillas de ruedas en medio de los pasillos y salas de espera, algunos de los cuáles llevaban más de 20 horas esperando una cama libre para poder ser ingresados en planta.
Pero son muchos más casos, Ana lleva dos años y medio esperando que la llamen para una revisión de cardiología en el Hospital Punta Europa de Algeciras, en el Hospital de Osuna hay actualmente 13.942 usuarios a la espera de una consulta de especialista y continúan las enormes colas a las puertas de los centros de salud.
Todo ello solo son algunos ejemplos de lo que está ocurriendo en la sanidad pública andaluza, son noticias que no saldrán en Canal Sur, una televisión pública al servicio único y exclusivo de Moreno Bonilla, pero es la realidad que soportan a diario miles de andaluces y andaluzas.
El candidato socialista a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Juan Espadas, ha propuesto fortalecer la sanidad pública destinando por ley el 7% del PIB andaluz frente al 5,5% actual. Propone asímismo un plazo máximo de 48 horas para ser visto en Atención Primaria y contratar a la totalidad de los 20.000 profesionales que estuvieron trabajando para el SAS durante la pandemia de Covid.
Es urgente mejorar la sanidad pública, porque hoy con Moreno Bonilla en Andalucía 1 de cada 10 andaluces están en lista de espera, son 860.000 personas. Son nuestros padres, son nuestros hijos, son nuestras familias. En 2021 la inversión per cápita en salud en Andalucía fue de 1.388 euros frente a los 1.679 de media nacional. Andalucía está a la cola de España en sanidad pública.
Esto está provocando que todo aquel que tenga posibilidades económicas se esté yendo a la sanidad privada. En este momento 1,7 millones de andaluces tienen pólizas privadas, un negocio que no deja de crecer año tras año.
Moreno Bonilla presume de superávit mientras destroza la sanidad pública. Falta presupuesto, faltan sanitarios, falta recuperar urgencias en zonas rurales, falta reforzar los hospitales, falta recuperar la Atención Primaria y falta impulsar la atención en salud mental.
¿Sr. Moreno Bonilla dónde están los 4.550 millones que el Gobierno de Pedro Sánchez destinó a Andalucía dentro de los fondos Covid entre 2020 y 2021 para fortalecer la sanidad y la educación públicas?
A pesar de todos estos recursos el presidente andaluz ha echado a la calle a 8.000 sanitarios y sigue destrozando la sanidad pública para favorecer el negocio privado. Moreno Bonilla es el enemigo número 1 de la sanidad andaluza.
A todos los que han hecho largas colas para ser atendidos en los centros de salud, a todos los que han esperado meses para ser atendidos por un especialista, a todos los que han esperado más de un año para poder operarse les recuerdo que tienen una magnifica oportunidad el próximo 19 de junio para hacer otra cola, una cola para ir todos a votar y mandar a Moreno Bonilla a su casa, solo así podremos conseguir que nuestros nuestros hijos, para nuestros padres y nuestras familias tengan una atención sanitaria digna.