Al final va a parecer que Ganemos estuvo detrás de la muerte de Kennedy. ¿Por qué digo esto? Pues por la sencilla razón de que durante los últimos días me ha llamado mucha gente que asegura habernos votado, pero que nos acusa de que si no le damos un sí a los presupuestos somos los culpables de todo lo que pasa y ha pasado en Jerez, no hay más que leer la prensa o las redes sociales.
No puedo negar que estos días no he dejado de pensar en lo que está pasando y por más que busco no encuentro un ápice de culpabilidad en nuestra decisión. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que nosotros no hemos engañado a nadie, ni con nuestro apoyo a la Investidura, ni con la defensa a las políticas sociales, como bien dejábamos reflejado con los Presupuestos que se tenían que haber aprobado en julio, o con el compromiso que teníamos con los trabajadores y trabajadoras del ERE, compromiso que alguien se encargó de dilapidar después de haber dicho aquella frase que generó tantas expectativas: “Bienvenidos a vuestra casa, de la cual no teníais que haber salido nunca”.
En ese acuerdo de Presupuesto había medidas para salvar Emuvijesa, el Villamarta, los colegios, los trabajadores del ERE y un largo etcétera, pero se ignoró. Otra de las cuestiones en las que me debato es: ¿Cómo utilizamos todo lo que está pasando para seguir en mi trinchera? La pinza: “Ganemos y PP nos están haciendo la pinza”, he llegado a escuchar. ¿Alguien en su sano juicio puede pensar que nosotros podemos tener algo a nivel político con esa organización? Nosotros tendremos respeto a nivel personal con ellos y con cualquier persona, pero entendernos a nivel político sería un insulto. Cómo vamos a estar al lado de quienes han sido capaces de agredir en un expediente arbitrario y político y echar a la calle, con la que estaba cayendo, a 260 trabajadores y dejar a sus familias sin nada, de quienes fueron capaces de vender el agua de todos para el beneficio de unos pocos, de estar envueltos en los casos Baltar, Bankia, Brugal, Bárcenas, Cooperación, Faycán, Gürtel, Hügel, y vamos solo por la H, imaginaos hasta la Z cuantos quedan, de los que hemos escracheado y nos fuimos a veranear a su playa del Hontoria, capaces de tantas cosas en favor de las élites.
La pregunta que más ronda mi cabeza, será por mi corto conocimiento y por haber estado siempre en la calle en defensa de los trabajadores y en especial, de los más desfavorecidos, es: ¿Qué va a pasar con las familias de los trabajadores de Emuvijesa, Villamarta y las que ocupan viviendas municipales? Si yo me abstengo, ¿sacará la regidora de la chistera los dos millones y medio que hacen falta o le dará otra patada a la lata y la desplazará un año más lejos, para así poder seguir echándole la culpa a los demás de su incompetencia y justificarse ante su partido? ¿Dónde estaba la gente que nos señala cuando algunos se abstuvieron para que siguieran gobernando los de los recortes o cuando nos manifestamos en contra del artículo 135? Sí, ese mismo artículo que hace que primero se les pague a los bancos, antes incluso a los trabajadores de un Ayuntamiento.
La responsabilidad; ¡Claro que somos responsables! Responsables de nuestros actos, con los ciudadanos, con nuestras ideas, con nuestra forma de ver la política sencilla y sin el despilfarro de los recursos, anteponiendo las personas a los bancos, justificando hasta el último céntimo de lo subvencionado, haciendo uso de lo comprometido y devolviendo a la sociedad lo que sobra para que no se lo queden otros, poniendo tiempo, dinero y esfuerzo para conseguir una sociedad mejor y sin desigualdad, no enriqueciéndonos ni haciendo de la política una profesión sino un servicio más por los más indefensos, por aquellos que no tienen más que el derecho a buscarse la vida, ¡pues claro que tenemos responsabilidad! O es que responsabilidad es solo levantar la mano para reparar lo que otros han estropeado.
Debatimos, discutimos, nos atrincheramos y decidimos. Y cuando decidimos después de largos debates nos convencemos de que hemos elegido el mejor camino para los demás, aceptamos las decisiones y sentimos la empatía que nos produce saber que estamos haciendo lo correcto por el bien común. Gracias compañeras. Si Ganemos no existiera había que inventarlo inmediatamente, porque en esta organización prevalece la democracia por encima de los egos.