Las nuevas tecnologías han provocado que la actualidad sea más caduca y, con ello, que los mensajes se diluyan. Incluso, existen circunstancias que nos acompañan en nuestro día a día y no somos conscientes de su verdadera importancia.
Básicamente, la desmesura y las ambiciones consumistas nos llevan a preocuparnos por banalidades, y se nos olvida lo importante: VIVIR. Precisamente, ha tenido que dar su testimonio una joven estrella para abrir corazones y destacar la importancia de la salud. A Elena Huelva le tocó afrontar un sarcoma de Ewing, un tumor que hace acto de presencia de forma especial en jóvenes, personas que tienen una vida por delante y numerosos proyectos. Pero, ella decidió convertirse en una influencer universal que antepuso su dolor por un cruel destino a difundir un mensaje cargado de esperanza.
Después de un mensaje de valentía auténtico y encomiable, la enfermedad se agravó y Elena falleció este martes, una noticia que nos dejó helados y tristes a todos los que la seguimos por las redes sociales. Una chica de 20 años no merece ese final, ni su familia tampoco. La "ley de la vida" no está escrita con esos renglones torcidos.
Sin embargo, hay personas que tienen una trayectoria longeva pero pasan por la vida de puntillas. Y la estrella de este artículo nos ha dejado un tesoro que merece algo más que unas meras palabras. Se trata de un legado que debe ir acompañado de un compromiso de la sociedad. La tristeza tiene que dejar paso a la admiración e implicación en sus reivindicaciones.
Por un lado, la positividad es un elemento esencial de nuestras vidas. Nuestras ganas siempre ganan, incluso cuando toca enfrentarse a las máximas adversidades. Hay una frase que define perfectamente esta filosofía: "nadie nos ha prometido un mañana, vive el presente".
Por otro lado, el cáncer es una patología que merece más investigación e inversión para la sanidad pública, universal y gratuita. La cura a numerosos tumores se muestra cercana, lo que merece un compromiso real de las Administraciones Públicas. Porque, si no se invierte en sanidad, el resto de cosas de la vida no tienen sentido ni lógica. Este mensaje tendría que quedar grabado para los oportunistas y populistas de manual que han lanzado telegramas de condolencia en estos días como palabras vacías.
En definitiva, Elena Huelva ha sembrado y llenado de cosas buenas este mundo, con su deseo de "más investigación para más vida". Nos toca empujar para que haya más unidades de investigación oncológica y se mejore la calidad de vida de los pacientes. Descansa en paz, pero personas como tú están presentes en el corazón. Tus ganas GANAN.
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