El pasado mes de septiembre de 2020, los delegados de CCOO de las distintas empresas del sector de la vid mantuvimos una asamblea general, en ella elegimos a los miembros de la comisión negociadora y recogimos el sentir de los mismos; por aquel momento aún no estábamos vacunados, manteníamos las medidas de seguridad provocadas por la covid-19 y en las empresas se mantenían los ERTE que se habían negociado y se estaban negociando nuevos ERTE en el sector que mantenían al personal en una situación de desventaja económica. En ese ambiente de inestabilidad e inseguridad el personal entendió que lo razonable a la hora de negociar un nuevo convenio fuese única y exclusivamente una pequeña subida salarial que permitiese recuperar algo de los ERTE.
La comisión negociadora así los transmitió a la patronal, quién rápidamente recogió el testigo para iniciar una ofensiva debido a la debilidad que mostramos a la hora de exponer nuestras pretensiones. En esos momentos la patronal establece dos vías para el nuevo convenio: la primera fue la congelación total del convenio. La segunda opción fue negociar algunos aspectos de interés por parte de la patronal (flexibilidad-disponibilidad) a cambio de una pequeña subida salarial (0% en 2021 y 0,25% en 2022). Lógicamente apostamos por negociar, y por ello elaboramos una plataforma con 18 puntos de nuestro interés donde abordamos aspectos muy significativos y de plena actualidad como es la contratación, la jornada, vacaciones, licencias, ayudas y plus transporte (que generan en las empresas una doble escala salarial).
El sector tradicionalmente lleva intrínseco la contratación de una abundante mano de obra temporal, en todos los convenios hemos intentado darle una solución a ese problema pues vemos como compañeros de hace años aún continúan siendo temporales y carecen de estabilidad. Algunas empresas a lo largo de esta negociación han negociado simultáneamente con su representación sindical los censos de fijos-discontinuos, pero la mayoría de empresas continúan contratando vía ETT o temporal.
Pese a elaborar y transmitir dicha plataforma, la patronal no tiene intención de negociar ningún punto de los desarrollados e insiste en cada una de sus reuniones en plasmar su flexibilidad-disponibilidad de una forma ambigua y sin justificar. Con la idea de que la patronal valore nuestras propuestas decidimos en marzo de 2022 hacer una propuesta seria en materia económica que valoraron muy positivamente aunque la rechazaron porque no habíamos aceptado nada de flexibilidad-disponibilidad; por ello en las reuniones posteriores decidimos dejar claro que esa flexibilidad-disponibilidad tenía que ser obligatoriamente voluntaria y por supuesto recompensada, para evitar que hubiese una doble escala salarial en el sector, por ello hicimos una media de lo que se estaba pagando por las citadas medidas de flexibilidad-disponibilidad en el sector y así lo expusimos. La respuesta fue un no rotundo pues ellos deseaban la gratuidad de las mismas. Siendo esta flexibilidad-disponibilidad y la inflación que vivimos, el principal motivo para convocar la huelga.
Será en este momento de convocatoria de huelga cuando la patronal comience una negociación seria y formal pues hasta dicho momento sus propuestas habían sido ambiguas y gratuitas; lo que no esperábamos es que detrás de sus medidas quisieran ampliar la jornada con horas extras negociadas en el Convenio cuando hace años que las horas están prohibidas, llegando incluso a ponerle precio a dichas horas extras (sin especificar número de horas) de sábados, domingos y festivos.
La convocatoria de huelga fue un éxito rotundo, todos los centros de producción estaban parados y los trabajadores muy concienciados y es aquí donde hacemos un alto para tomar una frase del compañero Agustín Tosco: “No lucha contra la injusticia solo el que la padece, sino el que la comprende”; la patronal en un arrebato de desesperación intenta minar la moral de los trabajadores enviando a la prensa y a los mismos trabajadores en forma de e-mail sus propuestas, que rápidamente son desmembradas y explicadas al personal, que entienden que lo importante es consolidar en las tablas y eso es precisamente lo que no quiere la patronal.
Durante estos días no fuimos lo suficientemente herméticos en la negociación y tampoco actuamos en bloque; muestra de ello es capítulo de la negociación con las empresas tradicionales de Sanlúcar que condiciona la negociación pues una parte de la Mesa hace suya la Propuesta de Mediación del SERCLA obviando la postura de la misma en la Mesa. Por suerte, y teniendo como objetivo el máximo beneficio para el personal, retomamos posturas y reconducimos la negociación que casi se rompe porque la patronal mantenía su postura de no consolidar una parte de la subida salarial y no aceptamos; aunque finalmente aceptamos una nueva propuesta de SERCLA, que volvía a mediar para convertir en una paga ese 1% anual.
Por todo lo expuesto, opino que el acuerdo es bastante bueno pues hemos conseguido gracias a todos aquellos que defendimos nuestros derechos y nuestros salarios de forma pacífica y en las puertas de los centros de trabajo: Mantener nuestras condiciones laborales sin ceder un centímetro en flexibilidad-disponibilidad y una gran recompensa económica del 4% consolidado en tablas más un 1% en una paga extra durante la vigencia del Convenio, como así lo han reconocido la inmensa mayoría de la Asamblea.
Agradezco la unidad y responsabilidad que hemos demostrado una vez más (en todo el sector), parando todos los centros de producción. Además, hago un inciso para indicar a la patronal que tome nota, la negociación ha de ser ágil y responsable. Existen elementos laborales que nos interesan a ambas partes y se pueden negociar, y no eludir las pretensiones del otro imponiendo las suyas.
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