Cuando la revista estadounidense Travel Leisure publicó el artículo titulado “Los 23 pequeños pueblos más hermosos del mundo: desde lugares populares hasta gemas ocultas", no podía faltar un pueblo andaluz. Se trata del municipio malagueño de Frigiliana, a tres horas en coche de Cádiz.
"Algunos lugares simplemente te dejan sin aliento después de verlos por primera vez, y Frigiliana aterriza en esa categoría", dice la revistar internacional de viaje sobre este precioso municipio que la hacen llamar la Mykonos andaluza.
Según el escritor del artículo, Frigiliana es “una hermosa joya escondida en las colinas del sur de España que aún pasa desapercibida y no ha sido tomada por los turistas". "Esas son buenas noticias para los viajeros interesados en pasear por el laberinto de encantadoras calles estrechas en el casco antiguo, ir de excursión a las ruinas del castillo, degustar tapas y beber vino local mientras contemplan la puesta de sol en paz", escriben.
Frigiliana forma parte de los pueblos blancos de Málaga. Su belleza es tal que fue galardonado con el I Premio Nacional de Embellecimiento en 1982 su casco histórico es Conjunto Histórico Artístico desde el año 2014. Está situado en la zona más oriental de la comarca de la Axarquía, asomada al Mediterráneo desde el Parque Natural de las Sierras de Almijara, Tejeda y Alhama.
Su comparación con la famosa ciudad griega se debe a sus pintorescas calles y escaleras. Una herencia morisca que el paso del tiempo ha dejado en el casco antiguo de Frigiliana, uno de los mejores conservados de la provincia.
Además de la belleza de sus calles, este municipio malagueño cuenta con una tradición gastronómica poderosa en la que destacan algunos platos como el choto frito en salsa de almendras, los variados potajes de verduras frescas o el potaje de bacalao en Semana Santa. Además, su paraje está rodeado de viñedos y olivares de la que sacan su mejor materia prima.