Hay un dulce entre Cádiz y San Fernando que no tiene paragón. Se trata de la torrija de arroz con leche con espuma de Pedro Ximénez y helado de leche merengada con melaza del Ventorrillo El Chato, un trifásico de la dulzura que sin probarlo, uno ya puede saber que quita el sentío.
Según apunta el medio gastronómico Cosas de Comé, el tema de la espuma es una novedad de este año para dar "un toque diferente a este dulce cuaresmal". Estamos ante un portento de torrija, un híbrido entre la clásica leche frita y el postre casero de arroz con leche.
Su elaboración difiere en freír la torrija en vez de quemarla, de forma que el interior del pan queda cremoso. "La espuma de px gaditaniza a la torrija, además de darle un toque diferente a lo que normalmente vemos, y el helado de leche merengada le da ese contraste frio con el calor de la propia torrija, y el dulzor alcohólico del PX", ha explicado Víctor Córdoba a Cosas de Comé.
Este dulce puede encargarse durante la Semana Santa para recoger en el establecimiento y llevarlo a casa, pero sin helado ni espuma.
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