El Ayuntamiento de Jaén mantiene su apuesta para desarrollar un Extrem Park o parque multiaventuras en los terrenos de Valdeastillas, donde se ubicaba el malogrado proyecto del parque acuático, y trabaja en la búsqueda de un inversor.
Así lo ha indicado a Europa Press el alcalde, Julio Millán, quien ha explicado que se trata de dar respuesta a las demandas de ocio de la ciudadanía a la vez que se ponen valor equipamientos "desaprovechados" en la capital, como el citado recinto, sin terminar tras una inversión superior a los ocho millones de euros.
En esta labor desde Patrimonio Municipal "con suelos que puedan atraer inversión" y tener "un aprovechamiento económico y una gestión público-privada", ha enmarcado la búsqueda de opciones en el recinto del que iba a ser un parque acuático.
"Es verdad que nos está costando trabajo encontrar un inversor que pueda desarrollar un proyecto ahí porque el vandalismo que se ha desarrollado sobre ese suelo ha sido tal la pérdida que hemos tenido que no es fácil, desgraciadamente. Y también porque hemos tenido una época mala (por el covid-19) para el turismo y el ocio. Ese sector ha estado afectado y ha sido difícil encontrar un proyecto", ha afirmado.
En todo caso, ha asegurado que se mantiene la idea que plantearon en campaña para dar vida a esa zona con Extrem Park, "un proyecto de ocio y turismo ligado al deporte alternativo, extremo y de aventura". "No hemos dejado de trabajar", ha subrayado el alcalde, quien ha aludido a contactos con empresarios del sector.
Millán ha apuntado que el modelo para hacerlo realidad sería "una concesión demanial de suelo", igual al utilizado en otros equipamientos deportivos y sociales, como el centro deportivo de La Victoria, el aparcamiento de caravanas en el Nuevo Jaén o la residencia de mayores prevista en el Polígono del Valle.
De este modo, el inversor presentaría "un proyecto definido" que el Ayuntamiento, previo análisis de los técnicos, sacaría a licitación pública, abriéndolo a la concurrencia de otros posibles interesados.
El parque acuático se impulsó en el mandato 2007-2011, con PSOE e IU en el gobierno local. Tras una inversión de más de ocho millones de euros con cargo a los planes E del Ejecutivo central, las obras quedaron en torno al 80 por ciento de ejecución.
Con el cambio de color en la Alcaldía, el PP anunció la renuncia a este proyecto debido a las dificultades para financiar su terminación y las dudas sobre la viabilidad de la posterior explotación. Lo sustituiría por un parque de aventuras.
Sin embargo, tampoco fraguó durante sus dos mandatos, entre 2011 y 2019, y las instalaciones han sido objeto de destrozos y vandalismo. Ya en la campaña de las últimas elecciones municipales, Millán planteó la creación del Extrem Park en este enclave y en ello, según ha incidido, sigue trabajando el equipo de gobierno (PSOE-Cs).
Según esa propuesta, tendría un espacio de restauración y de comida al aire libre, un circuito de patinaje de algo más de medio kilómetro, puentes colgantes, tirolina y tirolina rusa, una vía ferrata y un espacio para descenso de cañones artificial. También contaría con un área para parkour, un rocódromo, un pequeño auditorio, un fuerte vaquero para niños, un área de paintball y un skate park de 1.000 metros cuadrados en el que practicar con el monopatín, patinete y bicicleta bmx y con capacidad para acoger competiciones oficiales.
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