Netflix quiere poner fin a la política de compartir la cuenta en la plataforma que tienen muchos usuarios. El servicio de streaming, con un amplio catálogo de series, películas y documentales disponibles, cobra 17,99 euros por la cuota mensual premium, que quiere evitar que se siga compartiendo entre personas que no conviven, es decir, que pierda dinero.
Las cuentas de Netflix están pensadas para ser utilizadas por las personas que conviven en la misma casa, aunque en la práctica se comparten con amigos o familiares, algo a lo que quiere poner fin la plataforma de streaming.
Desde marzo de 2021, está mandando mensajes disuasorios. "Si no vives con el dueño de esta cuenta, necesitas tu propia cuenta para seguir viendo el contenido”, notificaron a más de un cliente", llegaron a decir a usuarios de la plataforma, para lo que pidió una verificación a través de un código.
Netflix está volviendo a pedir el código en cuentas de clientes, enviando al titular de la cuenta, un paso necesario para seguir utilizando sus servicios. La plataforma, en caso de que no se introduzca el código, invita a suscribirse e incluso amenaza con penalizaciones y multas por uso indebido.