A principios de octubre muchos fans de la película Coco (2017), de Disney Pixar, descubrieron que el mítico personaje Mamá Coco era una persona de carne y hueso. Lo supieron porque falleció a los 109 años en su pueblo, Michoacán, en México.
María Salud Ramírez Caballero fue la anciana que inspiró a la productora para la creación de este personaje tan querido de la película de animación ganadora de un Oscar. Su rostro dio la vuelta al mundo gracias a Disney, que suele captar la esencia de personas reales para construir personajes.
El plantea conocía allá por el 2017 a esta mujer "incansable y ejemplo de vida", según el secretario de Turismo de Michoacán, Roberto Monroy. La señora mexicana se ganó la admiración de los creativos de la plataforma que habían viajado a México en busca de documentación para la película.
El vuelo no fue en vano ya que conocieron Mamá Coco, con la que estuvieron conviviendo varios días junto a otras personas del pueblo para poder otorgar mayor verosimilitud al personaje. Según descubrió El País, que visitó su casa en 2021, esta mujer se dedicó toda su vida a la alfarería y crió a tres hijos quem, a su vez, tuvieron decenas de nietos.
La imagen de Doña María embelesó al equipo y la convirtió en un icono de la factoría. Desde entonces, según contó El País, Doña María se colocaba en una silla de ruedas junto a un cartel de la película y se hacía fotografías con los turistas que pasaban por allí a cambio de pocos pesos.