La borrasca Gerard deja episodios de frío intenso en toda España. Los vecinos de Cádiz también han notado esta bajada de temperaturas que les ha hecho salir ataviados de abrigos y chaquetones. En estos días, la terraza no ha sido el lugar más demandado. Sin embargo, para que los clientes no huyan de ellas, el dueño de un restaurante de la capital ha decidido instalar radiadores de aceite debajo de las mesas.
Juan Höhr, al frente del local Salicornia de la calle Plocia, no quiere que los comensales estén helados y ha cubierto las mesas con un mantel. La masa de aire de origen marítimo-polar no es impedimento para disfrutar de sus platos. Así lo ha contado a la revista gastronómica Cosas de Comé.
Las familias han agradecido estos calefactores para mantener las piernas calientes que sustituyen a las estufas altas típicas en estas fechas. Al dueño no le agradaban y ha optado por esta idea que ha observado en el Norte y en algunos pueblos de interior. Cuando los comensales se sientan, el apartado se enciende y pueden regularlo a su gusto.