El camino más visitado del viejo continente, sin lugar a dudas, es el Camino de Santiago. En el siglo IX se ideó como una de las rutas más importantes de Europa, convirtiéndose así en parte fundamental del reino de la península Ibérica. Por lo cual, no es tan solo un camino, sino más bien varios caminos que se van compaginando hasta llegar a Compostela.
Historia de este camino de peregrinación
Esta peregrinación conocida como el Camino de Santiago es una consagración católica de origen medieval. El propósito de la misma es llegar hasta el sepulcro del apóstol mayor, situado en la catedral de Santiago, en Galicia. Esta se considera como la ruta más visitada, en donde los feligreses caminan con las mayores manifestaciones de arrepentimiento y fervor.
Esta peregrinación desde el siglo IX es una de las mayores muestras de cristiandad desde época medieval, aun cuando no es hasta después de la caída de Granada en 1942 cuando Santiago de Compostela se declara como uno de los lugares de las tres peregrinaciones de la cristiandad, hecho que llega de la mano del Papa Alejandro VI.
Aunque el camino fue olvidado, actualmente ha conseguido aumentar el auge entre los feligreses. Recorrido bien sea a caballo, a pie o en bicicleta, quien decide emprender esta gran experiencia lo hace combinando la devoción, el disfrute, el deporte, la cultura y la naturaleza.
¿Qué motiva realizar esta peregrinación?
A continuación, te presentamos algunas razones que te harán querer recorrer las diferentes etapas que conforman esta peregrinación:
Visita el sepulcro del apóstol
Para los católicos, tan solo esto es motivo para querer hacer rápidamente esta visita. Inclusive para los ateos esto puede ser un gran motivo, debido a que, aunque no crean, les invade la curiosidad, aun cuando esta peregrinación no justifica el largo camino y los mínimos cien kilómetros de recorrido para recibir la acreditación conocida como Compostelana.
Peticiones al apóstol
Esto casi siempre ocurre en el caso de los desesperados o devotos que tienen a alguien muy enfermo y tienen fe en que con la ayuda del apóstol se recuperará.
Presenciar un milagro
Comúnmente entre los feligreses se comentan los milagros de Santiago. Si bien muchos de ellos solo lo afirman por no quedar mal, otros sin embargo, están realmente convencidos de esos sucesos.
Desahogarte
Según las vivencias, todas las personas lloran en alguna de las etapas del camino. En esos caminos se encuentra muchas almas, tocando la sensibilidad hasta del que lleva años sin llorar. En el caso del camino primitivo, es uno de los ideales para que liberes tensiones, permitiéndole desahogar penas arraigadas.
Recobrar la voluntad
El camino a recorrer es muy duro, pero recuerda que son largas horas de camino e incluso semanas. Es por ello, que la voluntad es lo más importante para lograr completar la travesía.
Planificación de las etapas
Este camino lo puedes realizar de distintas formas, dependiendo de la preparación, el tiempo y las ganas que tengas. Por esto, en el momento de planificar las etapas del recorrido, debes tener en cuenta diversos aspectos. Es de suma importancia que estés informado de lugares y localidades que atravesarás. Por ejemplo si visitas el camino lebaniego, debes ya saber todo lo interesante que deseas conocer de este.
También es aconsejable que te organices con distancias cortas, teniendo siempre en cuenta las posibilidades de todos. Entre las medidas diarias, oscilan en bicicleta entre 60 y 100 kilómetros y a pie entre 20 y 40 kilómetros. Por ende, es primordial estar prevenido para confrontar cada etapa, con una buena planificación. De esta manera, no tendrás que sufrir percances ni ningún tipo de susto.
Aunque no dé tiempo de recorrer todo el camino como lo planificaste, no debes preocuparte. Ya que esto suele suceder comúnmente, en este caso suelen dividir su peregrinación en varias etapas durante el año. Por ejemplo un año visitan el camino de Santiago portugués y otro año otro camino. Lo importante es conocerlo bien y disfrutar cada una de sus etapas, recuerda que la prisa no es una buena opción.
Consejos al realizar esta peregrinación
Antes de iniciar la peregrinación debes estar preparado físicamente, ya que este recorrido, como todos, no está exento de problemas. Aun cuando lo puede hacer cualquier tipo de persona, no debes dejar atrás el sentido común. Debes tener claro de que el mismo requiere de un gran esfuerzo. Por lo cual, tu salud física debe estar en óptimas condiciones, debido a que tendrás que recorrer grandes kilómetros diariamente.
Si te preparas mal para esta experiencia, puedes verte obligado a desistir, o lo que es peor, que se convierta en un calvario. Como recomendación, realiza varias excursiones cortas antes del viaje, bien sea al campo o a la montaña, tratando de llevar contigo la mochila, el calzado, entre otros. De esta manera, te pondrás en forma y tu cuerpo sabrá cómo reaccionar ante esta situación.