Ecologistas en Acción ha presentado alegaciones contra el proyecto de explotación de recursos de la Zona Aznalcóllar, propuesto por la multinacional Grupo México para su filial española Minera Los Frailes (MLF).
El proyecto contempla la instalación de una tubería de 30 km que partiría del recinto minero, atravesando los municipios de Sanlúcar La Mayor, Valencina, Olivares y Salteras, hasta llegar a un punto de vertido tóxico en Santiponce, en el Estuario del Guadalquivir, muy cerca de La Cartuja, una Zona de Especial Conservación protegida por la Red Natura 2000, cercana al término municipal de Sevilla.
Estas alegaciones fueron presentadas en el marco del procedimiento para el otorgamiento de concesión directa de explotación que está siendo tramitado por la Delegación Territorial de Industria, Energía y Minas en Sevilla. Se compartieron con diversos colectivos y organizaciones interesadas en el tema.
La empresa Minera Los Frailes (MLF) propone un vertido inicial al Guadalquivir de 17.520 millones de litros en un período de 18 meses, provenientes principalmente del vaciado de la Corta de Los Frailes (CLF) y de la Corta de Aznalcóllar (CAZ), esta última con lodos tóxicos almacenados desde la catástrofe ambiental de 1998.
Además, se plantea un vertido continuo al Guadalquivir de 2.600 millones de litros al año durante los 17 años de operación de la nueva mina subterránea. Sin embargo, el Dictamen Ambiental aprobado por la autoridad ambiental de la Junta de Andalucía aumenta este vertido a 4.000 millones de litros anuales, un incremento que no fue sometido a información pública.
Esta falta de transparencia, según Ecologistas, sobre el aumento del vertido al Guadalquivirm justifica la necesidad de un nuevo trámite de información pública, donde la ciudadanía pueda conocer el contenido del Dictamen Ambiental y exigir una alternativa que garantice el vertido cero.
El vertido propuesto "contaminaría todo el Estuario del Guadalquivir", poniendo en riesgo la biodiversidad de la zona y afectando la seguridad alimentaria de los productos cultivados en los arrozales y los alevines del caladero del golfo de Cádiz.
A pesar de los procesos de depuración anunciados, la carga contaminante acumulada en los 18 años y medio que se propone autorizar contiene metales pesados como Arsénico, Cadmio, Cobre, Cromo, Mercurio, Níquel, Plomo, Selenio y Zinc, entre otros.
El proyecto también ha levantado preocupaciones en cuanto al incumplimiento de los ayuntamientos afectados "en sus obligaciones de participación", información y transparencia, así como por el juicio oral que se celebrará entre marzo y julio de 2025 en la Audiencia Provincial de Sevilla contra 14 personas funcionarias y autoridades de la Junta de Andalucía, acusadas de delitos relacionados con la adjudicación de los derechos mineros de la Zona Aznalcóllar, asegura Ecologistas.
En este contexto, la autorización del proyecto de explotación se tramita para Minera Los Frailes (MLF), filial española de Grupo México, a pesar de las dudas sobre la seguridad jurídica y ambiental del mismo que plantea la asociación.