La Guardia Civil y agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía han disuelto una concentración no autorizada de 29 vehículos todoterreno que realizaban pruebas fuera de carretera en el cauce y la zona de servidumbre del Arroyo del Partido, en las inmediaciones de la aldea de El Rocío, en el municipio de Almonte, en Huelva.
Según informó el Instituto Armado en un comunicado, los vehículos participaron en esta actividad sin los permisos requeridos y se encontraban en el límite y el interior del Espacio Natural de Doñana. Aprovecharon la peregrinación extraordinaria de la Hermandad del Rocío de Triana para acceder a zonas restringidas sin ser detectados.
Los conductores realizaban maniobras para sortear obstáculos naturales como rocas, barro, arena y nieve, lo que causó un impacto ambiental en un área de alto valor ecológico. El tránsito de los vehículos afectó tanto al cauce del arroyo como a la vegetación de la ribera, además de alterar el hábitat de diversas especies del ecosistema.
Durante la intervención, los agentes identificaron a los 29 conductores implicados y tramitaron más de 60 denuncias por infracciones relacionadas con normativas ambientales. Las autoridades recalcaron la gravedad de estos hechos, subrayando la necesidad de proteger el patrimonio natural de la zona.
El operativo fue llevado a cabo por el equipo del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Doñana, en coordinación con agentes y celadores de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, así como patrullas de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil adscritas a la compañía de La Palma del Condado.
Las autoridades han recordado que el acceso no autorizado a espacios protegidos constituye una infracción administrativa grave, con posibles sanciones económicas significativas. Además, alertaron sobre el impacto negativo que estas prácticas pueden generar en un entorno de gran riqueza biológica como Doñana.
El Espacio Natural de Doñana es una de las áreas protegidas más importantes de Europa, con una biodiversidad única que alberga especies en peligro de extinción, como el lince ibérico y el águila imperial. La alteración de su equilibrio ecológico puede tener consecuencias irreversibles para la flora y la fauna del parque.
Ante estos hechos, la Guardia Civil ha solicitado la colaboración ciudadana para denunciar actividades ilegales que pongan en riesgo el medio ambiente. Asimismo, ha instado a los visitantes a respetar la normativa vigente y evitar acciones que puedan comprometer la conservación de los espacios naturales.
Las autoridades continúan trabajando para prevenir este tipo de incidentes y reforzar la vigilancia en zonas sensibles. El objetivo es garantizar la preservación de Doñana y evitar nuevas incursiones ilegales que perjudiquen el ecosistema.