Nervios e ilusión entre los más pequeños que comenzaban su etapa escolar, y nervios e ilusión entre los niños y niñas más mayores que regresaban a las aulas tras las vacaciones de verano. La vuelta al cole más cara, por aquello de la hiperinflación, ha tenido una buena noticia en Andalucía en este lunes grisáceo de mediados de septiembre: el presidente de la Junta, Juanma Moreno, que ha abierto el curso en Alhendín (Granada), donde ha inaugurado un nuevo centro de Infantil y Primaria, ha anunciado un cheque escolar de 100 euros para familias con rentas inferiores a 15.000 euros.
“Todo se ha encarecido”, ha lamentado Moreno, que ha comunicado públicamente la decisión de librar 20 millones de euros extraordinarios para destinarlos a “las familias con menos recursos”. El cheque será de un importe de 100 euros para cada hijo matriculado en la enseñanza obligatoria, que alcanza hasta los 16 años de edad, de aquellas familias, como se ha dicho, cuyas rentas sean inferiores a los 15.000 euros, unos 200.000 alumnos de Educación Primaria, Secundaria, FP Básica y Educación Especial.
El curso ha quedado inaugurado para 746.940 escolares de segundo ciclo de Infantil, Primaria y Educación Especial en 2.751 centros de Andalucía. En todas las capitales, grandes y medianas ciudades los políticos han pasado revista por algunos de los centros que componen la red pública. Los ayuntamientos han sacado pecho de las inversiones en mantenimiento —la competencia municipal en materia de educación—, mientras que la Junta de Andalucía, encabezada por su presidente, no solo ha puesto el foco sobre el aumento de docentes —frente a la merma de escolares—, sino que ha sacado pecho por la reducción en más de 4 puntos de la tasa de abandono escolar temprano.
Moreno, que ha avanzado que durante este curso finalizarán más de 570 obras por valor de 150 millones de euros —de las que se van a beneficiar unos 230.000 alumnos—, ha insistido en que hay datos que dejan a las claras que la educación pública andaluza mejora. “Un indicador relevante es que hemos reducido el abandono escolar temprano un 4,4% hasta dejarlo en el 17,7%, lo que supone la mayor reducción desde hace veinte años", ha afirmado.
El jefe del Ejecutivo andaluz ha ensalzado el papel de los docentes y ha resaltado que este curso, a pesar de que hay unos 15.000 alumnos menos en Infantil y Primaria por la bajada de la natalidad, hay más aulas y la plantilla fija más amplia de la historia con unos 124.000 docentes entre la red pública y la concertada.
Esta ecuación significa, a su juicio, que es el curso con la ratio más baja por aula de la historia. “En este curso contaremos con unos 5.000 docentes más a pesar de haber menos niños. Andalucía ha apostado por mantener la mayor parte de los refuerzos del curso pasado, hasta el 80%, pese a haber dejado atrás la pandemia", ha señalado el presidente andaluz, que ha apostillado que, si hay menos niños en las aulas, pero cada curso se sigue aumentando la plantilla docente, la consecuencia es que “baja la ratio. “Podemos afirmar que, a día de hoy, tenemos las ratios medias más bajas de la historia”.
Cada vez más comedores escolares con cocina autogestionada
En cuanto al número de unidades y pese a la baja natalidad, ha recalcado que se vuelve a experimentar un crecimiento global significativo con una importante atención en la Educación especial con 243 unidades más. Este curso serán 33 centros más los que cuenten con aula matinal y 16 más con el servicio de comedor que cubre las necesidades alimenticias de más de 210.000 niños en más de 2.000 centros públicos y a ello se suma que este curso habrá un total de 320 comedores más con cocina 'in situ', con lo que se llegarán a los 500.
Por su parte, el líder del principal partido de la oposición, Juan Espadas (PSOE-A), ha pasado de perfil por el arranque del curso escolar, y ha dejado en manos de uno de sus segundos espadas, el secretario de Organización y parlamentario Noel López, la valoración oficial del partido en el inicio de curso. López, que ha calificado a Moreno de “indolente” en materia educativa, ha asegurado que empieza el curso “con suspenso”, reclamando bajadas de ratio y modernización de las infraestructuras educativas. Dos asuntos sobre los que Moreno ha contestado con datos en paralelo.
"Exceso de papeleo superfluo" en los centros educativos
A nivel sindical, el sector de educación de CSIF ha publicado los datos de un sondeo llevado a cabo a través de su web que uno de cada tres docentes afirma que el curso escolar 2022-2023 ha arrancado con reducción de unidades en sus centros educativos. Además de reclamar a la administración autonómica la reducción del “exceso de papeleo superfluo” —el 96% de docentes lo ve abrumador— en los centros educativos, que además provoca “frustración y desmotivación” entre el profesorado, desde la central han asegurado que el 68% del profesorado asegura en el referido sondeo interno que el curso escolar 2022-2023 ha arrancado en su centro “sin la plantilla del claustro al completo”, mientras que el 34% indica que las obras que se han estado desarrollando durante el verano "aún no han concluido”.
CSIF ha lamentado, igualmente, el cierre de unidades que se está produciendo en la escuela pública en los últimos años y que asciende 1.161 unidades menos en los últimos cuatro cursos escolares, con especial incidencia en los cursos 19/20 y 20/21, ante lo que el sindicato aboga por “poner freno a esta tendencia y aprovechar la bajada de la natalidad por reducir la ratio de los grupos en lugar de cerrar unidades de la escuela pública”.