La deuda viva, la contraída a partir de préstamos a largo plazo con los bancos, crece imparable en Jerez. Mientras que un tercio de los municipios españoles logró reducir su deuda en 2020, a pesar del esfuerzo extraordinario que asumieron los ayuntamientos por la pandemia, el Consistorio jerezano elevó el dato hasta casi 800 millones de euros: 799.843.070,27 euros.
Como ya se sabe, se trata del segundo ayuntamiento más endeudado de España, con un endeudamiento municipal que si ahora se reparte por habitantes toca a 3.753,3 euros por cabeza, solo superado por los 4.266,5 euros por vecino que deben los residentes en Jaén.
Precisamente la capital jiennense fue el municipio español que más incrementó la deuda viva el pasado año, 225 euros más por habitante, mientras que Jerez fue la tercera (110 euros más por vecino, unos 24,6 millones de euros más). En el top ten de los más endeudados con los bancos hay otros tres grandes municipios andaluces: Algeciras (cuarta posición, 214,113 millones de euros); Huelva (sexta posición, 167,24 millones); y Cádiz (séptima plaza, 123,25 millones).
Los datos, hechos públicos este pasado miércoles por el Ministerio de Hacienda, evidencian varias cosas: la infrafinanciación que siguen sufriendo los ayuntamientos, especialmente los de municipios donde es tan costoso prestar servicios públicos (caso de Jerez, un mal agravado por la pandemia), el aumento del reconocimiento de deuda histórica con proveedores (deuda comercial que se ha transformado en deuda financiera, especialmente gracias a los mecanismos del Estado para flexibilizar las condiciones en los préstamos), y por qué no, cierta relajación tras el colapso de 2012 a la hora de gastar dinero público —en junio pasado, sin ir más lejos, se externalizaron 40 contratos públicos en 15 días, muchos de ellos podían prestarse directamente por la plantilla municipal, cuya nómina anual concentra gran parte del gasto público—.
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