La número 1 de la candidatura del PP en Cádiz el próximo domingo 19 de junio, Ana Mestre García, una de las dirigentes andaluzas de máxima confianza del candidato a la reelección a la presidencia de la Junta, Juan Manuel Moreno, no piensa en encuestas triunfales, ni en posibles pactos con Vox tras el domingo. Sí deja claro la dirigente jerezana, hasta hace unas semanas delegada del Gobierno de la Junta en Cádiz y con una dilatada trayectoria política pese a su juventud (40 años), que "las posturas radicales destruyen; desde el equilibrio se puede dar respuesta a todos".
Entre acto y acto de campaña, antes de un nuevo debate provincial, cita a lavozdelsur.es en el Hotel Tío Pepe. En el exterior ya roza el termómetro los 40 grados, y aun así, Mestre accede a fotografiarse en una de las calles más bonitas del mundo, inserta en el entramado del complejo bodeguero de González Byass: el famoso callejón emparrado de los Ciegos. El análisis del debate de Canal Sur del pasado lunes, el último en campaña, las perspectivas electorales, el miedo a la deserción de votantes por el calor, el balance y las propuestas de futuro centran la conversación.
¿Qué impresión le causó el debate de anoche?
La de una presidente que tiene las ideas claras, que no entra en las provocaciones de quienes quieren aprovechar la oportunidad de la campaña electoral para hacerse un espacio, pero haciéndole a la vez un flaco favor a los andaluces. El presidente, de manera constructiva y propositiva, vino a decir lo que pretende para Andalucía. Es importante que sigamos viendo en el candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, al mismo que ha estado ejerciendo de presidente y que, a día de hoy, sigue ejerciendo. Es la misma persona. Sería muy chocante ver a un presidente con unos modos, unas formas, un talante, totalmente distinto como candidato en este periodo electoral. Juanma está demostrando que es auténtico y que su idea es seguir construyendo para Andalucía y hacerla crecer como hasta ahora.
Las acometidas de Olona contra Moreno en el debate: "Hizo bien en no caer en la provocación"
¿No le vio en algún momento incómodo ante las acometidas de Macarena Olona, la candidata de Vox?
Los debates son complicados de interpretar, pero sí es cierto que, teniendo sangre, es normal que haya afirmaciones o provocaciones que generen cierta actitud. Algunos parece que van a hacer un teatro, más que a hacer un debate donde demuestren a los andaluces por qué les piden el voto. Simplemente, dentro de esas provocaciones, hizo bien en no entrar y en defender el proyecto del PP para Andalucía porque, a lo largo de estos tres años y medio, ha dado frutos. Necesitamos tiempo y un presupuesto que pueda cubrir las necesidades de los andaluces.
¿Cómo vio al resto de los aspirantes?
Tergiversando mucho la realidad y hablando muy negativamente de Andalucía. Y eso no es bueno. Primero, porque no es verdad; y segundo, porque no es bueno para Andalucía. Mentir tiene las patas muy cortas y los datos en materia sanitaria, educativa, de políticas sociales, los datos de turismo, de autónomos, de exportaciones, la fiscalidad que hemos generado después de la bajada masiva de impuestos… todo va en la dirección de un crecimiento nueve décimas por encima de la media de España, en torno a un 6,1%, y por tanto, esos datos son irrefutables. Otra cosa es que los demás candidatos quieran hacer ver en estos momentos que Andalucía está peor que antes de llegar Juanma Moreno. Creo que hay que ser mucho más serios cuando estás en política y, aunque estés en la oposición, hay que ganarse la credibilidad y la confianza de los ciudadanos empezando por decir la verdad.
"Por primera vez tenemos un presidente de todos los andaluces: querido, valorado y reconocido"
¿Y qué le pareció el ‘momento torrijas’ de Juan Marín, o las intervenciones del principal adversario el domingo, Juan Espadas?
No está mal introducir de vez en cuando alguna nota que aporte naturalidad en el debate. Lo de las torrijas fue una anécdota, pero forma parte de la naturalidad con la que te diriges a la audiencia, no todo tiene que ser calculado o impostado, hay que dejar que aflore la naturalidad. En cuanto a Juan Espadas, lo vi muy perdido. Parece que no tiene conciencia ni de su etapa en los gobiernos socialistas, ni de un proyecto constructivo. Me sorprende que el señor Espadas esté haciendo campaña en Andalucía sin traer una solución al precio de la cesta de la compra, al de la bombona de butano, al de la luz o al del gasoil. ¿Cómo es capaz el PSOE de estar haciendo campaña sin hablar de estos asuntos, que son los que más preocupan a todas las familias? Está muy al margen de la realidad, queriendo ser destructivo a toda costa. Eso no beneficia a Andalucía y dice muy poco de su proyecto. Cuando uno tiene verdaderamente una vocación de servicio público y un proyecto para su tierra, lo cuenta. Elude meterse con el otro porque tiene mucho más que contar, y eso no lo vemos del PSOE.
Todas las encuestas hablan de una victoria clara de Juanma Moreno y del PP el 19J, ¿tienen pesadillas con la posibilidad de un pacto de gobierno con Vox?
(Ríe) No, yo tengo sueños y son muy bonitos. Por tanto, salimos a jugar el partido y a ganar con la mayoría suficiente para poder sacar adelante todas nuestras reformas legislativas, los presupuestos y poder dar de nosotros mismos nuestra mejor versión. Estamos haciendo una campaña ilusionante, con contenido, con propuestas, no solo estamos contando lo que hemos hecho, sino qué vamos a hacer, hemos renovado compromisos con los ciudadanos. Respetamos mucho la voluntad del ciudadano y estamos haciendo una campaña como si las encuestas no fuera tales, estamos batiéndonos el cobre porque merece la pena el proyecto en el que hemos confiado. Y es que, además, tenemos un presidente que, por primera vez, es de todos los andaluces: querido, valorado y reconocido porque su talante se lo ha permitido.
Ha demostrado tener mano izquierda, mano derecha, ha mirado hacia todo, y ha puesto soluciones. Las soluciones de Juanma han sido lógicas y no ideológicas, de ahí que hoy en día las encuestas digan lo que dicen y la gente, de un sitio o de otro, le valore. Ha sido un hombre capaz de poner a Andalucía por delante, con soluciones eficaces, porque ha acertado con muchas de las soluciones que hemos puesto a muchas amenazas que ha tenido Andalucía, incluida la pandemia, por lo que ha sido un presidente en el que merece la pena confiar otros cuatro años porque en tres años y medio no es suficiente. Lo importante es que ya hemos comenzado; no será suficiente, pero es un buen comienzo.
¿Esa transversalidad con la que, según dice, gobierna Moreno es lo que le hace tener tanto recelo por tener que depender, en un hipotético gobierno, de Vox?
Un gobierno como el que nosotros planteamos ahora mismo nos daría la posibilidad de ser mucho más ágiles, eficaces y rápidos a la hora de tomar decisiones. Si no tuviéramos la mayoría absoluta o suficiente, necesitaríamos hacer pactos puntuales; esa es nuestra intención para sacar algunas cuestiones en particular. Pero nosotros queremos gobernar con la mayoría suficiente, y eso pasa porque los ciudadanos nos otorguen el mayor número de confianzas en torno a Juanma Moreno para poder desarrollar nuestro político que, hasta ahora, hemos demostrado que es para todos.
¿Cuando habla de ser más ágiles y rápidos se refiere a no tener que depender un socio que les haga perder tiempo en debates irreales, como negar la violencia machista o el cambio climático?
Ni por ahí pasamos, ni pasamos por los mensajes destructivos de la izquierda. Hay, desgraciadamente, hay mensajes para todos los gustos. El mensaje destructivo de esa izquierda que no ve nada positivo de lo que se ha hecho... No se puede ocultar que hay un mayor número de profesores, de profesionales sanitarios, más inversión en sanidad y educación, mayor PIB... Eso no se puede ocultar por mucho que la izquierda plantee una radiografía de desastre total y absoluto. Por tanto, ni unos mensajes extremos, ni los otros.
"Ni pasamos por Vox, ni por los mensajes destructivos de la izquierda"
Aquí lo importante es la moderación y estar equilibrados, porque desde el equilibrio se puede dar respuesta a todos, se puede escuchar a todos. Y hay una predisposición a mejorar lo que no funciona. ¿Desde los extremos quién soluciona los problemas de los ciudadanos? Es imposible. Las posturas radicales no traen soluciones, las posturas radicales destruyen. Y tenemos a un presidente que ha demostrado con creces que tiene capacidad para gobernar para unos y para otros. Se han alcanzado acuerdos muy importantes a lo largo de la legislatura para avanzar, solventando escollos que teníamos sin solucionar: con los sindicatos, con las organizaciones agrarias, en el ámbito sanitario, educativo... Todo esto tiene el mérito de la persona que ha sabido identificar los problemas de su tierra y saber que las soluciones tienen que pasar por una política moderada, para todos, donde la ideología no sea la protagonista.
¿Cómo ha visto la evolución de Moreno, usted que lo conoce desde hace años y es una persona en la que, además, tiene depositada una enorme confianza?
Lo que radica en la actitud del presidente, principalmente, es su humildad y los pies pegados a la tierra. Es sensible y tiene capacidad de escuchar, y cuando uno persona tiene eso y, además, construye un proyecto para solucionar grandes problemas que tiene nuestra tierra desde hace muchos años, cree en sus propuestas, las defiende y las pelea. Él ha tenido muy claro que Andalucía, y los andaluces, eran el centro de sus políticas y lo ha peleado: ha defendido a Andalucía en el ámbito europeo y nacional.
"En tres años y medio, y con una pandemia, hemos hecho mucho, pero mentiría si no dijera que tenemos mucho por delante"
Y se ha puesto al frente en cosas como la revolución verde, demostrando que no hay que ser de izquierdas para defender al medio ambiente. Hemos empezado a invertir en infraestructuras hídricas lo que antes no se invertía con los gobiernos socialistas, y ahora tenemos en nuestro programa una revisión de la fiscalidad ambiental. Es una persona sencilla, que cree en lo que dice y, como cree en lo que dice, actúa en consecuencia. La vida es mucho más sencilla de lo que aparenta ser, incluso en la política.
Y por tampoco ser autocomplaciente, ¿qué cree que se podía haber mejorado o qué pueden mejorar, si renuevan la confianza de los andaluces?
Tenemos mucha tarea pendiente. En tres años y medio, y con una pandemia, hemos hecho mucho, pero estaría mintiendo si no dijera que tenemos mucho por delante. La sociedad avanza a pasos agigantados y la administración tiene que huir de estar por detrás y ponerse por delante siempre.
A nivel de ejemplos en la provincia de Cádiz, tenemos que abordar el segundo Hospital de Cádiz, en el que se está trabajando, y tenemos que ver la fórmula para poder desdoblar la Arcos-Antequera. Hay que valorar si podemos fasear ese proyecto porque es crucial para Andalucía, vertebraríamos Cádiz con la A-92. Es un proyecto de unos 100 millones de euros y hay que hacerlo con cabeza. Tenemos cosas por hacer, como la próxima reforma fiscal que debe alcanzar al 100% de los contribuyentes, después de la que hemos hecho que ha alcanzado al 83% de los contribuyentes; y tenemos que seguir desarrollando el decreto de simplificación burocrática porque eso ya, como tal, ha traído empresas a Andalucía, ha recuperado fuga de cerebros y nos ha permitido que tengamos más autónomos que Cataluña, y estamos a la cabeza de España. En el caso de Cádiz, es la segunda provincia andaluz donde mayor número de autónomos se crea, la primera provincia exportadora, y el primer destino turístico de España. Esos son datos que hay contarlos. Pero es que Andalucía ha sido donde más ha bajado el paro de España en mayo.
Ahí le podrán decir que ha influido la reforma laboral del Gobierno de España.
Eso lo están diciendo en todos los debates. Sí, sí, hombre... la reforma es de hace tres meses y dicen que los datos de mayo son gracias a la reforma del Gobierno de España. Una pena, solo hay que tener cabeza y estar al día de las noticias para saber que eso no es así. Pero bueno, cada uno que cuente su libro que nosotros lo que hacemos es demostrar que lo que decimos lo hacemos. Y ahí están los hechos.
En materia sanitaria, ¿hay algo que les haga pensar que llevan razón esas voces críticas que hablan del mal funcionamiento de la sanidad pública, como por ejemplo a la hora de pedir cita con el médico de cabecera?
Veníamos de tener a la sanidad en la UCI. Acuérdense que hace nada más que tres años y medio teníamos a la sanidad en la UCI; la hemos llevado a planta a pesar de la pandemia; y lo que queremos es darle el alta en la próxima legislatura. Si es que es obvio que estamos aquí para mejorar nuestros servicios públicos. Si es que nosotros hemos llevado a cabo la mayor inversión en materia sanitaria, 2.000 millones de euros más. Tenemos en Cádiz 1.300 profesionales sanitarios más que en 2018, hemos iniciado la equiparación salarial, la carrera profesional, hemos empezado a invertir lo que no se invertía en obras en hospitales, centros de salud y consultorios...
"En tres años y medio nos han visto la patita, demostrando con hechos para qué hemos venido, y entre otras cosas, para mejorar la sanidad"
Es que lo de Jerez, por ejemplo, es sangrante. Hemos tenido que hacerle la obra a toda la zona de quirófanos que salió ardiendo en 2016. Llegamos y estaba la puerta cerrada, todo calcinado y punto. ¿Eso dónde se ha visto? ¿El PSOE tiene legitimidad para hablar de sanidad y, encima, en los términos en los que lo hace? Las listas de espera eran puro sufrimiendo, esto era un caos en materia sanitaria, y lo que hemos hecho es empezar a buscar soluciones, motivar al personal, dotarle de mejores condiciones, empezar a gestionar las necesidades en materia de infraestructura, eliminar las listas de espera... y nos coge un pandemia. Mire usted, es que lo que hemos hecho no lo han hecho otras comunidades autónomas. La sanidad ha llegado a superar el 7% del PIB, y la educación, el 5. Eso ya se ha cumplido, en tres años y medio. Planificamos las prioridades porque el dinero es público, de todos, y en materia sanitaria hemos volcado todos los presupuestos que podíamos y más. ¿Que no es suficiente? Claro, pero es un buen comienzo. En tres años y medio nos han visto la patita, demostrando con hechos para qué hemos venido, y entre otras cosas, para mejorar la sanidad.
Volviendo a la cita con las urnas del domingo, y a la vista del fuerte calor que hace, ¿el gran peligro es un exceso de confianza, un éxodo de posibles votantes a las playas?
El exceso de confianza es peligroso siempre, hablemos de lo que hablemos. Ahora mismo, hablando de una campaña electoral, imagínese un 19 de junio con 40 grados... claro que lo afrontamos con respeto, pero también intentando hacerle ver a la gente la importancia de su voto. Cada voto suma y las mayorías se construyen voto a voto, por eso es muy importante hacer ver a los ciudadanos que la playa está siempre y que, en todo caso, el día es muy largo y hay momentos para todo si se sabe organizar. ¿Qué haría yo? Lo más importante, lo primero, y para mí es ir a las urnas y aprovechar esa cita con la democracia para decidir quién queremos que gobierne nuestro futuro. Pero también se puede ir a la playa y luego ir a votar. Lo que no podemos es quedarnos sin ir a votar.
¿Qué tal con su nuevo presidente nacional, Alberto Núñez Feijóo?
Muy bien, muy bien. No defrauda. Alberto es una garantía para los españoles, sin lugar a dudas.
Sin tutela de Génova: "Feijóo es consciente de que quien sabe qué tiene entre manos es el que está en el territorio; se nota muchísimo el cambio"
¿Es verdad eso de las manos libres de Andalucía, no se inmiscuirá en los acuerdos a los que, llegado el caso, haya que llegar?
Lo ha demostrado ya. Desde el minuto uno.
Se nota el cambio entonces.
Se nota muchísimo. Alberto es tal cual es, transparente y lo que dice lo hace, como Juanma Moreno. No me lo invento cuando hemos podido ver cómo se han podido llevar a cabo las listas en Andalucía, como Juanma Moreno es uno de los presidentes en los que él más se apoya, cómo está refrendando y participando de esta campaña, y lo que viene es a colaborar, eso es muy importante.
No a imponer desde Génova.
No a imponer. Eso es muy importante. Porque al fin y al cabo, el presidente Juanma Moreno lo ha dicho en los debates y siempre, que a él no le mandan desde Madrid, sino todo lo contrario. Esto es un equipo y se respeta la responsabilidad que cada uno tiene, porque así lo manifiesta Alberto Núñez Feijóo, que es consciente de que quien sabe lo que tiene entre manos es el que está en el territorio y quien tiene una doble responsabilidad tan importante como es presidir la Junta de Andalucía y el PP de Andalucía. Respeto total y absoluto, y lo estamos viendo: viene a colaborar y a contribuir.
En su caso particular, y en un hipotético nuevo gobierno del PP en la Junta, ¿se ve al frente de alguna consejería?
Si por algo me he caracterizado es por trabajar, y por trabajar sin esperar nada a cambio. Trabajo creyendo en lo que hago y lo que me llegue, me llegará por mi trabajo, pero no por otros motivos o por lo que yo aspire, ni mucho menos. Creo en el proyecto político del PP, formo parte de él, y doy la cara por él porque merece la pena. Hacemos las cosas de manera distinta y, sobre todo, respetando a los ciudadanos. Esa es mi única aspiración: convencer a los ciudadanos de que el domingo lo principal es decidir en qué manos ponemos al Gobierno de Andalucía, y espero que sea en manos de Juanma Moreno.
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