De la Casa Blanca a Sevilla. Pedro Sánchez no ha tenido dudas a la hora de elegir el lugar en el que quería arrancar la campaña. Y es que tanto la capital hispalense como la provincia ya son habituales en los comienzos de las campañas electorales del actual presidente del Gobierno. Tanto cuando se trata de una cuestión de primarias, como cuando son unas elecciones al uso.
Además, Sánchez ha participado en el acto con Antonio Muñoz y Juan Espadas sacando pecho por las últimas inversiones del Gobierno en Sevilla, como la línea 3 de metro o la Agencia Espacial Española que tendrá su sede a orillas del Guadalquivir.
El presidente del Gobierno ha trasladado a los sevillanos en este acto el "rotundo compromiso" de su gobierno con esta ciudad, y al hilo ha indicado que el Ejecutivo va a "transferir en junio 20,2 millones de euros para las obras del tramo norte de la Línea 3 del metro", así como va a "empezar ya con los estudios para la conexión ferroviaria entre el aeropuerto y la estación de Santa Justa".
Sánchez se ha comprometido también a "culminar el cierre de la ronda de circunvalación de la SE-40", y a la construcción de 2.500 viviendas asequibles en el conjunto de la provincia de Sevilla a través de la Entidad Pública de Suelos (Sepes), y aprovechando también terrenos del Ministerio de Defensa (en los terrenos en desuso del cuartel de Artillería y cerca del aeropuerto, según ha detallado) para cumplir el "compromiso" de posibilitar que la vivienda sea "un derecho", como se recoge en la Constitución, y "no un problema como lo es para mucha gente de este país".
Con un lleno en Fibes, el líder del PSOE se ha mostrado convencido de que no tiene "ninguna duda" de que el PSOE ganará estas elecciones "en toda España", y volverá a ser "la primera fuerza política", como ocurrió en la anterior cita de elecciones municipales de 2019.
En el mitin han intervenido la alcaldesa de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), Ana Isabel Jiménez; el secretario provincial del PSOE sevillano y regidor de La Rinconada, Javier Fernández; el secretario general del PSOE de Andalucía, Juan Espadas, y el alcalde de Sevilla y candidato en las próximas elecciones, Antonio Muñoz.
También han asistido a este acto, entre otros dirigentes y representantes socialistas, la vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero; el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, y el secretario de Política Municipal de la Ejecutiva socialista y vicepresidente primero del Congreso de los Diputados, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis.
Pedro Sánchez ha reivindicado durante su intervención las "cosas formidables" que está llevando a cabo su gobierno, impulsando una "transformación estructural", la "modernización" del país y un "avance de todos nuestros territorios, logrando cosas que hace muy poco tiempo parecían inimaginables", según ha defendido.
En esa línea, ha señalado que "estamos demostrando que se pueden revalorizar las pensiones y, al mismo tiempo, reducir el déficit de la Seguridad Social", o "reconstruir el Pacto de Toledo" con una reforma de las pensiones "de acuerdo con la Comisión Europea y con los sindicatos", y ha apostillado que "quienes dicen que eso es imposible es porque quieren justificar sus recortes".
Sánchez ha llamado a reivindicar la "paz social", que ha venido de la mano de "esa reforma laboral que recuperó el diálogo que otros despreciaron", y que "ha recuperado derechos para los trabajadores", según ha defendido, y ha criticado que "la derecha lleva años anunciando un apocalipsis que nunca llega".
En esa línea, ha señalado que por parte de la derecha "dijeron que íbamos a destruir empleo, que íbamos a entrar en recesión y que íbamos a disparar la inflación" y, en cambio, España supera los 20 millones de afiliados a la Seguridad Social, los organismos internacionales están revisando al alza sus previsiones de crecimiento de la economía española y "somos uno de los países con menor inflación de toda Europa", según ha remarcado para añadir que "hay que hacerse cargo de la frustración de la derecha", a la que ha reprochado que recurre "al insulto, la descalificación y la amenaza de derogar".
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