La Junta 'estalla' contra el Gobierno por la financiación: "Sánchez es el presidente más antiandaluz"

Las comunidades del Partido Popular han pedido formalmente la celebración de un Consejo de Política Fiscal y Financiera para conocer la postura del Ejecutivo de Sánchez tras la polémica por la "singularidad" de Cataluña

Juanma Moreno, presidente de la Junta, en un acto de este martes.

En el Palacio de San Telmo y en Carmona. La Junta de Andalucía tiene claro que el debate de la financiación autonómica lo tiene ganado de cara a la ciudadanía y así lo reconocen algunos de los dirigentes que la forman. Sobre todo si se privilegia a Cataluña. Las declaraciones realizadas en los últimos días por Pedro Sánchez refuerzan la postura del Gobierno andaluz, que se siente cómodo en una discusión eterna.

Ramón Fernández-Pacheco y Antonio Sanz por un lado y Juanma Moreno por el otro han vuelto a recriminar al Ejecutivo central que pueda favorecer a Cataluña en un nuevo sistema de financiación autonómica donde se tenga en cuenta su "singularidad", pero no la del resto de comunidades autónomas. Con el actual modelo, aprobado en 2009 y caducado hace diez años, Andalucía calcula que pierde entre 1.000 y 1.500 millones al año al no tener en cuenta cuestiones como el paro o el peso poblacional.

Sanz ha sido el más tajante en las críticas que desde la Junta de Andalucía se han vertido este martes contra un posible agravio entre regiones. "Pedro Sánchez es el presidente más antiandaluz de la historia", ha señalado. El argumento comienza a ser habitual en las filas del Partido Popular. El propio Juanma Moreno lo deslizó el pasado jueves en la sesión de control celebrada en el Parlamento de Andalucía. "A más Sánchez, menos Andalucía", dijo el presidente.

Moreno ha participado en un acto de los cursos de verano de la Universidad Pablo de Olavide en Carmona y allí ha vuelto a pronunciarse sobre una cuestión que considera trascendental para Andalucía. La Junta ha reivindicado en los últimos meses un fondo de compensación transitorio para tapar el "agujero" que deja el actual sistema de financiación. Pero no ha tenido éxito en la reclamación.

El presidente andaluz ha dejado claro que "no va a permitir ni un menoscabo, ni un agravio ni un maltrato más a Andalucía. Menospreciarla es condenar a tres cuartas partes del país a no poder progresar en los próximos años, condenar también a los andaluces a no poder desarrollarse y romper un proyecto común y compartido como es España".

En este sentido, Moreno ha dejado claro que no descarta emprender acciones legales contra el Gobierno si Andalucía no sale bien parada de esta cuestión. "Vamos a combatir la desigualdad con todos los instrumentos que tengamos a nuestra disposición. Que nadie piense que Andalucía va a permitir que se pisoteen sus intereses de presente y de futuro".

Fernández-Pacheco, portavoz de la Junta de Andalucía, también se ha pronunciado de una forma similar. "No queremos una singularidad que coloque Andalucía por encima de otros territorios, sino que queremos una financiación negociada con el resto de comunidades autónomas y con el Gobierno de España".

"Es absolutamente inaceptable, rompe con el principio de igualdad entre los españoles, rompe con el principio de solidaridad y lo que es peor, nos trata al resto de comunidades autónomas como singularmente necias al intentar convencernos de que lo mejor para todos nosotros es que paguemos los privilegios que Pedro Sánchez está obligado a pagar a los independentistas para seguir en el sillón de la Moncloa", ha agregado.

Uno de los argumentos más utilizados por la Junta de Andalucía es que, precisamente, fue María Jesús Montero la persona que puso sobre la mesa una propuesta de financiación para Andalucía. Dicha iniciativa fue votada en el Parlamento de Andalucía cuando ella era consejera de Hacienda y Juanma Moreno líder de la oposición. El PP votó a favor y la medida salió adelante sin votos en contra. Entonces gobernaba Mariano Rajoy desde La Moncloa, aunque los populares tampoco movieron ficha para cambiar el sistema de financiación.

Quienes sí han movido ficha esta vez han sido los barones del PP, aprovechando el gran poder territorial que tienen actualmente. Los doce presidentes autonómicos y los dos de Ceuta y Melilla se han unido para solicitar formalmente un Consejo de Política Fiscal y Financiera, el órgano que debe aprobar el nuevo sistema de financiación. En una carta remitida a María Jesús Montero, las comunidades del PP solicitan conocer la postura del Gobierno de España en este tema.

El PSOE en los últimos meses ha respondido a las peticiones del Partido Popular pidiendo que trasladen un acuerdo conjunto para intentar sacar a la luz las diferencias que pueden existir entre comunidades autónomas como Andalucía, Galicia o Madrid. Sin embargo, los populares insisten en que debe ser el Gobierno el que ponga a todos de acuerdo. 

El debate sobre la "singularidad" de Cataluña ha provocado cierta incomodidad en varias federaciones socialistas. La más numerosa sigue siendo Andalucía y el PSOE-A tuvo que dejar claro esta semana que no iba a permitir un modelo que perjudicase a la comunidad. Pese a ello, Juan Espadas ha vuelto a criticar el discurso de Juanma Moreno. "¿Agravio es para el Sr. Moreno Bonilla que Andalucía reciba 34.000 millones de euros más que cuando gobernaba Rajoy y nos recortó 11.000? Ya está bien de mentir a los andaluces con su propaganda y confrontación. Los resultados positivos en economía y empleo no son responsabilidad suya, sino el resultado de las políticas del Gobierno español, a las que el PP vota sistemáticamente que no".