La llegada de Donald Trump a la Casa Blanca ha venido acompañada de centenares de decisiones que van desde lo simbólico -nombrar el Golfo de México como Golfo de América- hasta lo más ejecutivo, como la militarización de la frontera Sur de Estados Unidos. Y se prevé una vuelta al aislacionismo que ya prometía Trump en su primer mandato, finalizado hace cuatro años, pero que ha llegado con el anuncio rápido de la salida de su país de la Organización Mundial de Salud, algo que ha contentado a sus corrientes políticas negacionistas.
Y el mundo contiene el aliento respecto a lo que ocurrirá con el comercio. Se avecina un nuevo episodio de guerra comercial. Joe Biden no se ha abstenido de ellas. Y en lo que afecta a Andalucía, Estados Unidos impuso la pasada semana un incomprensible cierre de frontera al pimiento almeriense. Con Trump, pueden ser más.
EEUU es el principal destino no europeo de nuestros productos y quinto destino mundial para las #exportaciones andaluzas.
— Carolina España (@CarolinaEspanaR) January 21, 2025
Más que nunca, necesitamos diplomacia, que el Gobierno deje la confrontación a un lado y sea proactivo a la negociación, por el bien de nuestros productos. pic.twitter.com/kZ159OdPtX
El problema es que, parece, Trump no solo se guía por sesudos análisis, sino por una intuición en la que confía ciegamente y que le lleva a afirmar falsedades sin ruborizarse, como aceptando que todos contienen el aliento ante su próximo movimiento. Si no, difícil es entender que haya situado a España, Spain, como la S del grupo de los BRICS, los países de economía emergente, futuras -si no ya- potencias mundiales. Amenazó con aranceles a productos españoles del 100%, cuando España, como miembro de la UE y teórico aliado de Estados Unidos, está lejos de pertenecer a los selectos BRICS.
Desde Andalucía, Carolina España, consejera de Economía y portavoz del Gobierno de Juanma Moreno, ha recordado que Estados Unidos es el primer socio comercial no europeo. Que el pasado año las exportaciones llegaron a casi 3.000 millones y que venían creciendo tras el esfuerzo de internacionalización de las empresas andaluzas.
La Junta ve que es de reprochar en el Gobierno el hecho de no estar plenamente alineado con Trump. "Pedimos más negociación y menos confrontación", ha señalado España. En eso pueden encuadrarse declaraciones del presidente del Gobierno y de los ministros que han hablado de la gran alianza de la extrema derecha que ha fortalecido el propio Trump y otros apoyos como Elon Musk. Pero España no ha roto, al menos de momento, ningún puente con el presidente estadounidense, que sí ha mandado un mensaje a sus socios europeos en la OTAN: deberán incrementar su gasto militar porque Estados Unidos va a reducir su aportación al Atlántico Norte, y si Europa quiere ser fuerte, tendrá que armarse.
Tan solo ese movimiento generará nuevas necesidades presupuestarias en países como España. Pero, además, la tensión América-Europa puede provocar incluso caídas del PIB si Trump impone nuevos aranceles y Europa contesta con la misma medida.
"Pedimos prudencia al Gobierno de España, que a su vez tine voz en la Unión Europea. Las relaciones comerciales con Estados Unidos deben ser buenas, nos jugamos una parte importante de las exportaciones", señalaba Carolina España. "Hay que ser proactivos con el diálogo".
Más allá de eso, poco puede hacer Andalucía para que las relaciones con Estados Unidos sean buenas. No tiene, lógicamente, competencias en diplomacia y relaciones internacionales, y la estrategia española, a su vez, está condicionada por la de la Comisión Europea de Von der Leyen, de la misma familia política que el PP.
La portavoz de la Junta es plenamente conocedora del panorama internacional y ha mencionado en rueda de prensa que puede haber dificultades en el corto plazo con la entrada de coches eléctricos chinos a cuenta de los aranceles de Trump, que ve en el gigante asiático a su mayor rival por la hegemonía comercial. Pero, al menos, Carolina España quiere que el Gobierno de Sánchez renuncie al "frentismo" para que no se complique más la situación.