La Junta de Andalucía adjudicó el 29 de noviembre de 2021 dos contratos de emergencia para reparar carreteras de la provincia de Cádiz. Al menos eso figura en el Portal de Transparencia, aunque posteriormente a la publicación de esta pieza Fomento se ha apresurado a aseverar que se debe a un error.
6,4 kilómetros de la A-2200 en Arcos fueron adjudicados de manera directa por este procedimiento a Juan Veas Pérez SLU, constructor jerezano, por valor de 1.307.189 euros (IVA incluido), mientras que, como se ha venido publicando en días pasados, el otro contrato, 1.185.845,23 euros para reparar 3,5 kilómetros y medio en la A-390 entre Medina y Chiclana, fueron a parar a Barveal SL, administrada por Bárbara Veas, hija del empresario.
En ambos casos, como han reconocido —el constructor ha asegurado a la SER que no tiene vinculación con la empresa de su hija—, subcontrataron los trabajos por falta de capacidad, pese a que las adjudicaciones lo prohíbe.
En el caso de JVP, la empresa de Veas Pérez, registrado como licitador de Fomento, no tenía en el momento de la adjudicación, a la que se invitó a otras seis empresas, la calificación habilitante y no había depositado en el Registro Mercantil las cuentas de 2020 ni las de 2021 por lo que la Junta, asegura el referido medio, debía desconocer sus cifras de negocio y su número de empleados.
En la SER, Veas Pérez ha declarado que fue invitado por la Junta, pero no recuerda quién le invitó al procedimiento de emergencia.
En el caso de su hija, sigue siendo imposible contactar con ella para, por ejemplo, conocer cómo se produjo el cambio en la sociedad en julio de 2020, ya que inicialmente estaba radicada en El Puerto y se dedicaba a ocio y hostelería de la mano de los conocidos empresarios del Grupo Capote, y pasó a dedicarse a la construcción, ya con sede en Guadalcacín (Jerez), bajo la denominación de Barveal. Su domicilio es una planta alta de una casa alquilada en el centro de la ELA jerezana.
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