María Jesús Montero ya es oficialmente candidata a dirigir el PSOE de Andalucía. Y tras un proceso que se antoja anecdótico, será la nueva líder de los socialistas andaluces. Un día después de que Juan Espadas anunciara su marcha, la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Hacienda toma su relevo. El anuncio se ha producido en un acto que en principio iba a ser un 'encuentro con militantes de Sevilla', pero que ha acabado reuniendo a decenas y decenas de líderes del PSOE de las ocho provincias y de multitud de municipios.
Durante media hora, Montero se ha dirigido a su público como si de un mitin se tratara. En varias ocasiones ha arrancado aplausos y ha envalentonado a los suyos. Un día de vitaminas para el PSOE andaluz, y donde la aún ministra -no se sabe todavía cuándo dejará sus cargos en el Gobierno- ha dicho que viene para "reconectar con los andaluces". "Vengo a ganar", gritaba. El primer objetivo es obvio, convencer a los suyos de que se puede.
Montero llegaba al hotel sevillano -inicialmente iba a ser la sede del partido, pero poco después el propio partido entendió que el acto se iba a desbordar de gente- con euforia, elevando los brazos, saludando, abrazándose. Prácticamente no la dejaban avanzar. "No vuelvo, porque nunca me marché, siempre estuve aquí, siempre trabajé para Andalucía, y sigo trabajando para Andalucía". "Es el momento político más especial que he tenido en toda mi vida, podéis imaginar el nudo en la garanta".
Poco después de comenzar su discurso, se ha dirigido a Juan Espadas, que da un paso al lado para ceder el protagonismo y el liderazgo del PSOE a su compañera. "Ha hecho un trabajo inmenso en un momento muy duro para nuestra organización", insistía Montero, que ha sacado a Espadas al centro del escenario para fundirse en un abrazo. "El partido te está inmensamente agradecido".
Montero ha aprovechado para iniciar ya su campaña no de cara a las primarias, que ganará porque tiene el apoyo de una evidente mayoría amplísima, sino contra la Junta de Andalucía. "Me duele Andalucía, porque el Gobierno andaluz hace que mucha gente sufra porque no recibe atención sanitaria. A los que somos sanitarios nos llaman familiares, amigos, para preguntar qué se toman, porque la cita con el médico es para dentro de diez días, porque me han dicho en el hospital que no me pueden ingresar". La vicepresidenta ha hablado también de la educación, de la falta de plazas en la FP, de todo lo que no funciona para que "nuestros jóvenes se tengan que ir más allá de Despeñaperros".
Sobre la Junta, ha dicho que "los que van de moderados" han dedicado "media rueda de prensa del Consejo de Gobierno inmiscuyéndose en los asuntos de un partido [por el suyo, el socialista]. Que se dediquen a gobernar, que dejen de confrontar y de apropiarse de los méritos del Gobierno de España". Frente al ruido, a las denuncias, tiene que haber proyecto en el PSOE, y ha animado a los propios militantes a difundir su mensaje. "Tenemos que capilarizar la sociedad, estar en cada sitio, porque ahí es donde se libra la batalla".
"Sí, ya sé que todo lo que significa el relato, que tiene que ver con lo que otros cuentan, pero nunca sustituirá a la conversación que cualquier persona pueda tener con un socialista honesto, que le habla desde el corazón, que le habla desde los valores, que le habla desde los propios principios".
Desde abajo, dice Montero, se puede dar la vuelta a las encuestas. "Estamos aquí y estamos dispuestos a dar la batalla, porque vamos a ganarla, porque necesitamos ganarla. No para nosotros, para la gente que está ahí fuera, para todos los que requieren políticas públicas en vivienda, en empleo, en los barrios pobres, en la lucha contra el maltrato a las mujeres, contra la discriminación, para que no haya, como hubo hace tantísimos años, niños que tengan dificultades para el desarrollo".
El mitin sin papeles de Montero iba creciendo en calor. "La gente progresista de Andalucía está invitada desde ya a participar en este proceso, codo con codo, mano con mano, porque entre todos tenemos que conseguirlo. Por Andalucía libre, que dice nuestro lema, por España, por la humanidad, para que ese clima que viene internacionalmente encuentre una frontera blindada de España, de Andalucía, donde no pasarán. Porque no pasarán".
Levantando su brazo derecho, Montero finalizaba su intervención con agradecimientos a los militantes y cargos "por construir partido siempre". "Hasta la victoria siempre", gritaba para cerrar. En ese momento, un gran grupo de gente se acercaba a Montero para pedirle una foto. Frente a las cámaras de decenas de móviles iba posando la socialista, que ha empezado este 2025 como el intento del PSOE de lograr un revulsivo, un chute de optimismo y de vitaminas.