La acogida de apenas 300 niños y niñas migrantes en todo el país ha provocado un auténtico cisma político en la derecha española. Santiago Abascal ha amagado con romper los gobiernos de coalición que comparte con el Partido Popular si la formación de Alberto Núñez Feijóo acepta el reparto. El tema, aunque no afecta directamente al Gobierno de la Junta de Andalucía, ha tenido repercusiones en la política andaluza.
Vox en Andalucía no puede romper el Gobierno, pero sí puede dar por finiquitadas las relaciones con el Partido Popular. Unas relaciones que actualmente no son relevantes, pero que en un futuro podría ser decisiva como lo fueron en la pasada legislatura, cuando los doce diputados de Vox propiciaron la llegada al Palacio de San Telmo de Juanma Moreno.
La distribución de migrantes ha estado presente en la sesión de control a la que se ha enfrentado Juanma Moreno este jueves. El presidente andaluz se ha encontrado con las dos vertientes: los que le acusan de acoger a pocos migrantes y Vox, que critica que Andalucía se haga cargo de 30 niños y niñas. Además, el PSOE ha denunciado el rechazo de los populares a reformar la Lay de Extranjería, que es el auténtico conflicto que se está negociando en la conferencia sectorial de Tenerife.
"Yo soy de los que creía que nos podíamos entender, fui uno de los diputados que le hizo presidente. Si se concreta lo de Canarias y aceptan cambiar la seguridad de los andaluces por un puñado de billetes, sólo es va a quedar el PSOE", ha dicho Manuel Gavira, portavoz de Vox, a modo de amenaza y siguiendo la línea de su formación en el resto del territorio.
Una amenaza que Moreno ha rechazado frontalmente. "Si cree que estamos poniendo en peligro a la ciudadanía andaluza porque tenemos el corazón así de ancho para que niños y niñas se vengan con nosotros y ayudemos a 30 o 300 más, vamos a seguir con el corazón así de ancho y rompan lo que quiera romper, tendrán que explicárselo a la ciudadanía", ha asegurado el presidente de la Junta. "Si entra un niño tenemos que acogerlo. Decir que 300 menores ponen en peligro a los españoles es un discurso grueso. Es falso y lo defenderé donde sea", ha añadido.
Precisamente, el presidente de la Junta ha querido apuntarse un tanto con este tema y ha señalado al PSOE, en concreto a Juan Espadas, al que le ha dicho que "viene molesto porque no les ha salido la estrategia de Sánchez. Hemos dicho sí a la solidaridad y están poniendo una vela para que Vox no rompa con nosotros porque a Sánchez se le acaba un discurso". Mientras tanto, los diputados del PP no veían con malos ojos que se llevara a cabo esta ruptura porque les permitiría armar un discurso independiente que no tienen desde los pactos para las comunidades autónomas.
En la misma línea, tras ser acusado por otros grupos, Juanma Moreno ha reconocido que "hablamos de niños y niñas que atraviesan un continente y un océnao para sobrevivir. No uso la palabra 'mena'", ha asegurado sobre el término que se suele usar de forma despectiva por parte de Vox y también por algunos dirigentes del PP para referirse a estos menores migrantes. "Vamos a participar por solidaridad, institucionalidad y por una cuesitón moral con las personas vulnerables", ha proclamado el presidente andaluz antes de matizar las palabras de su partido sobre el uso de las Fuerzas Armadas contra los migrantes. "La participación del Ejército sería para auxiliar y rescatar a los migrantes".
No obstante, el líder del Partido Popular ha vuelto a criticar la acción del Gobierno de España denunciando que no ha puesto "recursos". "Nuestra manta se acorta por otro lado. Los recursos salen del ámbito social", ha expresado Moreno para justificar que Andalucía ponga límites a la acogida.
De la misma forma ha denunciado que el Gobierno no tiene una política clara de inmigración y ha calificado la ley como "improvisada". Moreno, del mismo modo, ha mostrado su malestar por no haber recibido ningún euro para poder hacer frente a los acogimientos.
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