"Se han dicho muchas cosas de ella. Una negociadora implacable. Una mujer con convicciones, de izquierdas. La segunda. Que tiene una visión. Cuando se propone algo, lo logra. Lo siento por Moreno Bonilla. No solamente dice, sino que hace. Es una extraordinaria gestora de lo público, comprometida con Andalucía. En los años que llevo al frente del gobierno de España nunca me he encontrado una política de la talla de María Jesús Montero. Lo tiene todo y lo da todo. Por España y a partir del 2026 por Andalucía". Así ha descrito el presidente del Gobierno Pedro Sánchez a la nueva secretaria general del PSOE-A. Una bendición al paso que su vicepresidenta y ministra de Hacienda ha dado para recuperar el feudo autonómico por excelencia de los socialistas.
Su discurso en la clausura del XV Congreso regional celebrado en Armilla este fin de semana deja una muestra de la importancia del aterrizaje de Montero en esta tierra. Gradas, sillas, entradas, colas. Todas repletas. Plagadas de banderas andaluzas. Más de 3.000 invitados y una ejecutiva renovada, que tiene en su legado una baza principal para pelear las elecciones a un PP todavía con mayoría absoluta en la comunidad, pero que se va a encontrar en 2026 un PSOE ya rehabilitado tras años en la lona política.

"La vicepresidenta del Gobierno, la ministra de Hacienda que más recursos ha volcado para blindar lo que es de todos. La educación, la sanidad, los servicios públicos. Vas a ser una extraordinaria presidenta de la Junta de Andalucía. Nunca ha habido tantos recursos, ni tantos fondos como con María Jesús Montero al frente de Hacienda. Y nunca ha habido un proceso privatizador como el que está perpetrando Moreno Bonilla en Andalucía. Es un problema de modelo, de convicciones. Vamos a pasar del privatizar al verbo blindar en cuanto los servicios públicos", ha incidido Sánchez.
Perdro Sánchez lamenta "dejar marchar" a Montero
Su intervención y la de Montero han estado plagados de piropos de ida y vuelta. Mientras que para el presidente del Gobierno, Montero ha sido "una de sus principales colaboradoras", remarcando la tristeza de "dejarla marchar", para Montero, Sánchez es hoy por hoy "el faro de la socialdemocracia en Europa frente a la ola reaccionaria". El que se besen no se ha cantado porque se daba por sentado. Tal y como ha insistido Montero, su aterrizaje a la política andaluza y es la intención de replicar el modelo que tiene el PSOE en Madrid. "Nos hemos conjurado para que Andalucía tenga un gobierno que trabaje en la misma dirección Que no trabaje a dos velocidades. Que lo que se hace en el Gobierno de España redoble sus efectos en Andalucía", ha avisado la nueva secretaria general de los socialistas andaluces.
Propuestas, unidad, el BOE y el “progreso” frente a la “ola reaccionaria”
Sánchez, que ha conseguido levantar al público socialista de su asiento y ha puesto en su límite el aplausómetro prácticamente desde su entrada al recinto, ha reivindicado su labor de gobierno estos siete años. Los mismos, casi, que el PP lleva en la Junta. Subida del salario mínimo, la gestión de la pandemia, de la guerra en Ucrania, la crisis energética, la inflación, la influencia conseguida en Bruselas en cuanto a política internacional y el impacto que eso ha tenido a nivel económico y político en un momento crítico para el viejo continente. Todo ha sido relatado e incluso reiterado durante casi una hora tanto por él como reseñado previamente por Montero. Es más, esta ha llegado a decir que "Sánchez nos coloca en el lado correcto de la historia".

El presidente del Gobierno ha insistido en "la ola reaccionaria ultraderechista" y las alianzas del PP con Vox. "Mientras que en Alemania tienen una derecha moderada, aquí tenemos una derecha tutelada", ha insistido, apuntando al primer pacto que llevaron a cabo los populares con el partido de Abascal, precisamente, para arrebatar la Junta de Andalucía a los socialistas. Frente a esa "ola reaccionaria", el "odio y los bulos" y el ataque a los derechos adquiridos, la igualdad o el europeísmo, el presidente ha insistido en "utilizar el BOE contra esa internacional ultraderechista". Temen, ha incidido Sánchez, desde Trump a Putin, a una Europa que es "la viva prueba de que un mundo mejor es posible" y que por eso quieren debilitar. De hecho, al acabar tomaba un vuelo desde el aeropuerto de Granada.
El PSOE se ha ofrecido en estos años, ha remarcado, como la solución a este nuevo conflicto. “Menos mal” que ha gobernado durante estos siete años de continuas crisis. "Las razones por las que cada uno se afilio a este partido siguen intactas", ha señalado el presidente en un ambiente, el de este XV congreso regional del PSOE-A que ha servido precisamente como un aliento, un subidón de autoestima para la marca y las bases del socialismo andaluz. Que vuelve a las esencias, incluso hasta los comienzos de la autonomía que llevan su firma. "Ese 28 de febrero significó que el futuro siempre da la razón al progreso", ha resaltado Sánchez en uno de los momentos más álgidos de su discurso.
Del "shock" del PSOE al "miedo" del PP
Las expectativas de Montero al frente del partido para las próximas generales son máximas. Y aunque entre la militancia, a tenor de lo escuchado en los pasillos de las instalaciones de la Feria de Muestras de Armilla estos días puedan aminorarse, confiando en al menos en convertirse en alternativa de gobierno y recuperar voto perdido, lo que ha querido dejar claro la nueva secretaria general andaluza es que el "partido deja de estar en shock".
"Siempre ha tenido miedo de que el PSOE de Andalucía recuperara el tono. Este señor se ha encomendado al shock que supone perder el gobierno y estar en la oposición. Quiero decir que se vayan preparando que este partido está fuerte, está unido, tiene ganas y lo va a hacer posible. Lo vamos a conseguir. Os digo siempre: ese nerviosismo no es porque teman a María Jesús Montero, temen a un partido despierto, unido y que trabaje en la victoria. Un PSOE fuerte es imbatible. Le tiene miedo al PSOE”, ha remarcado Montero.

Esa unidad, que está fuera de toda duda después de las tensiones entre susanistas y sanchistas de estos años, se fragua además en una conexión entre caras jóvenes, como la de María Márquez, nueva vicesecretaria general del partido en Andalucía y número dos de Montero, y la defensa del legado de nombres que van desde Escuredo, nombrado presidente de honor del PSOE-A tras este congreso, a Chaves, Griñán o Susana Díaz.
A nivel de proyecto, Montero contrapone la "falta de propuestas" y la Andalucía del "folclore" de Moreno, una suerte de Make Andalucía Great Again en el sentido progresista del término. Desde el estatuto en el año 80 al Instituto de la Mujer, a la primera Ley general de Educación, pasando por la primera protección y denominación de los Parques Naturales o que la sanidad pública andaluza fuera reconocida ya a principios de este siglo como una de las joyas de la corona de su autonomía frente a la crisis actual. Todo entre una larga lista que probablemente se repita casi de memoria en los siguientes meses en cada mitin, en cada rueda de prensa, en cada debate, en cada entrevista. Montero ha vuelto a colocar a la derecha "como rancia", "que nunca ha creído en Andalucía" desde los albores del referéndum de autonomía. "Todos recordamos ese 'Andaluz este no es tu referéndum'".

Al tiempo que ha tenido como ministra de Hacienda rifirrafes continuos con el presidente Moreno por la financiación, Montero pedirá inversiones y financiación, tal y como le ha dicho a la pléyade de ministros que la escuchaba junto al presidente del Gobierno. Esa tensión entre la política nacional y la autonómica y las contradicciones que pueda tener serán claves, pero sobre todo, la fuerza con que un partido anteriormente hegemónico pueda despertar en estos 16 meses.
Montero alude en este sentido a los "alcaldes, concejales, militantes, simpatizantes de base". A la vuelta la potencia del municipalismo y la piel con la ciudadanía. "Después de ganar las elecciones autonómicas vamos a por las elecciones municipales y las vamos a ganar con la ayuda de todo el partido. No somos ingenuos. Hay mucho tirando chinas, jugando a la antipolítica, pretendiendo que el ruido, que la pelea, aleje a los ciudadanos del voto. En bulos, en mentiras, que haga que se duerma. Este partido que no se quiebra ante todo ese ruido. Es de valientes defender cada día nuestros valores. Cabeza alta, mucha razón, mucha pasión, pero sobre todo mucho trabajo, que es como este partido ha cumplido y como se ha comprometido siempre con la democracia de este país", ha resumido la nueva líder de los socialistas en Andalucía.