El PP ha registado este miércoles su enmienda en la tramitación del Congreso de la llamada ley de amnistía, de la que se beneficiarán políticos catalanes huidos de la justicia como Carles Puigdemont, tras el acuerdo para la investidura entre Junts y el PSOE.
En esa enmienda, el PP no presenta propuestas concretas sino directamente un texto alternativo, algo esperado al existir un rechazo completo a esta norma. En ese texto, lo que se propone es algo tan alejado del actual proyecto como es la "disolución" de partidos que promuevan un referéndum ilegal o decreten directamente la independencia de un territorio.
Afectaría, entonces, a Junts, ERC o la CUP, formaciones que fraguaron la declaración de independencia de Cataluña. No afectaría a otras formaciones independentistas que no han dado estos pasos, como PNV o Bildu, o cualquier otro partido de corte regional.
Los populares han registrado este texto alternativo con otros puntos, como la sanción a "autoridades, cargos o funcionarios públicos que promuevan la inobservancia de las leyes o el incumplimiento de las resoluciones judiciales".
En la práctica, si bien el PP habla de "disolución" de estas formaciones políticas, implicaría su ilegalización, aunque los populares no se han referido con estas palabras al texto que proponen.
Sí afectaría esta norma a otro tipo de organizaciones que no son partidos políticos, como Omnium Cultural o la Asamblea Nacional Catalana, entidades que fueron clave para poner en marcha el referéndum de 2018.
Esta reforma no afectaría a la Ley de Partidos, según ha detallado el PP, que fue la herramienta jurídica utilizada para ilegalizar organizaciones afines al terrorismo etarra años atrás, un filtro que sí pasó ante los tribunales la formación Bildu, actualmente en el Congreso.