El barómetro del Centra, el llamado 'CIS andaluz', revela una nueva caída de los socialistas, respecto a las elecciones de 2022, y respecto al mismo sondeo del mes de octubre de 2024.
De celebrarse hoy elecciones en Andalucía, el PP podría obtener entre 57 y 59 escaños, con opciones, así, de mejorar el resultado actual de 58 parlamentarios. Pasaría del 43,1 al 43,5% de los votos. Mejora en casi dos puntos respecto a octubre, cuando el PP obtuvo algo menos del 42%, un escenario en el que, con todo, mantenía la mayoría absoluta. En cuanto a la tendencia, parece que lo que detectaba la oposición, una pérdida de la confianza hacia Moreno, no queda refrendado con este nuevo barómetro.
Lo que sí hace es hablar de una caída importante del PSOE. Si en octubre tenía perspectivas de mejorar respecto a los 30 escaños que consiguió en 2022, ahora se movería en una horquilla de entre 26 y 27. Baja tres respecto a junio del 22, pero una sangría en dos meses, cuando optaba a obtener 32. Entre medias, la tesitura a nivel nacional, con escándalos como el de Aldama con novedades cada día, dificulta y mucho las perspectivas de un Juan Espadas muy cuestionado. El barómetro de octubre era leído por los socialistas cercanos al secretario general como una posible nueva tendencia, la de que se estaba recortando tímidamente con el PP, pero que podía ser el inicio de un cambio de tendencia. Ese discurso se rompe en el momento en que Juan Espadas tiene enfrente a Juanfran Serrano como favorito de Ferraz para las primarias del mes de febrero, como adelantó hace dos semanas lavozdelsur.es.
Respecto al resto de fuerzas, Vox recupera algo de fuelle respecto a octubre y tiende a igualar los resultados de hace dos años, con un 13,3% de los votos, apenas dos décimas menos, y entre 13 y 15 representantes, frente a los 14 con los que cuenta en el Parlamento. Se mantendría a pesar de la irrupción del partido de Alvise Pérez, Se Acabó la Fiesta, que con un 3,7% de los votos podrían alcanzar el mínimo para obtener hasta dos escaños, aunque en el límite en muchas circunscripciones para no llegar al mínimo en ninguna provincia y diluir sus apoyos y quedarse fuera.

Las izquierdas, eso sí, parece que crecen. Por Andalucía distribuiría mejor el voto entre provincias que hace dos años, y aunque bajaría en número de papeletas, dos décimas menos, podrían traducirse en más asientos en el Parlamento, de los cinco actuales a entre seis y ocho. Adelante Andalucía, por su parte, igualmente se deja medio punto respecto a 2022, pero los andalucistas de izquierdas seguirían con representación en esta era post-Teresa Rodríguez, repitiendo dos asientos y con opción a un tercer representante.
Un barómetro, en resumen, que certifica la mayoría de Moreno, la pérdida de confianza del PSOE y que apunta a que en 2026, dentro de año y medio, podría mantenerse una legislatura muy parecida a la actual, con un Gobierno del PP que, por ahora, no necesitaría a ninguna fuerza para gobernar. Es un jarro de agua fría para Juan Espadas, que con estos números tendría aún más difícil convencer a los suyos de que tiene opciones reales de recuperar el poder en la Junta.