Las primeras primarias de la historia del PSOE de Cádiz para elegir secretario provincial se celebraron este domingo. El resultado muestra una división casi exacta entre el 51,1% de militantes que apoyaron al actual líder, el también alcalde de San Roque Juan Carlos Ruix Boix, y el 48,5% que respaldó al regidor de Rota, Javier Ruiz Arana.
Apenas 12 horas después de que se cerrara la votación dominical, el ganador comparecía este lunes en la sede provincial de la plaza de San Antonio de Cádiz, en un pequeño escenario abarrotado de partidarios que tuvieron problemas para ubicarse.
Su euforia electoral era evidente. Constantes aplausos, cabezas que asentían las frases tras el orador y coletillas, "muy bien, muy bien", cuando lanzaba alguna afirmación rotunda.
Ruiz Boix pide a los compañeros que han respaldado la opción de Arana, la derrotada, que "dejen de jugar al Stratego" y presume de mandato largo: "Quedan por delante tres años y dos meses, ya no seré Juan Carlos el breve".

El renovado secretario general de los socialistas gaditanos adelanta que será Cristina Saucedo la que dirija las negociaciones para formar la nueva ejecutiva provincial. Y advierte de que la incorporación de los opositores internos "no será matemática, estarán los que estén disponibles, los que quieran aportar". Nada de contar con un 48% de partidarios de Ruiz Arana, por tanto. "Queremos lealtad, no fidelidad".
En un claro ejercicio de memoria interna, afirma que no contará con compañeros "que sumen cero, como ya sucedió en la ejecutiva de 2021" y como ejemplo lanza un mensaje a los que han cuestionado a Mamen Sánchez, aliada, en la dirección socialista de Jerez, la ciudad más poblada de la provincia.
"Mamen Sánchez ha ganado por 31 votos, así que los compañeros que corrieron a una moción de censura ya saben que no tienen el apoyo de la militancia", resume Ruiz Boix en el apartado de los debates locales.

El reelegido líder descartó que su rival interno, Ruiz Arana, vaya a estar en esa dirección provincial: "Se lo ofrecí y se lo vuelvo a ofrecer, pero lo rechazó", comenta. El responsable provincial socialista repitió nueve veces el nombre del juego de mesa Stratego para ironizar sobre los movimientos internos de sus oponentes y compañeros de partido, sin resolver tras las primarias de la jornada previa.
Llegó a concretar que los máximos estrategas internos que cuestionan su liderazgo "son dos", aunque eludió dar sus nombres. Como adelanto de su gestión, deja caer que los candidatos socialistas que perdieron las elecciones municipales en 2023 no repetirán y les pide "generosidad para dar paso a otros".
"Hay que pisar el territorio todos los días, en las seis comarcas de la provincia, y no sólo en campaña electoral", asegura. Como anuncio de relevancia política, Ruiz Boix afirma que piensa "retomar el diálogo con La Línea 100x100 para recuperar el gobierno de la Diputación Provincial antes de que termine el año 2025, sin tener que esperar a las elecciones municipales".
El anterior intento de pactar con la formación linense un gobierno de coalición para recuperar la corporación provincial es uno de los presuntos errores que le afean a Ruiz Boix los oponentes internos en el PSOE provincial.
Lejos de mostrarse preocupado por el estrecho margen de su victoria (51,1% frente a 48,5%), la calificó de "mayoría absoluta". También restó importancia a que obtuviera menos votos (1.823) que avales (2.211) por parte de sus compañeros.

Achaca esa diferencia a que su candidatura "tuvo seis días para reunir los avales con cierta calma y sólo hay una jornada para la votación, un solo día en el que pueden coincidir desde viajes del Imserso hasta jóvenes que hacen Erasmus, carnavales o lluvias".
A pesar de su actitud de exigencia y reproche hacia los que han formado la otra candidatura, la de Ruiz Arana, reiteró su intención de tener "la mano tendida" y renueva unos llamamientos, aparentemente contradictorios, "a la unidad".
Entre sus agravios internos, achacó a los que cuestionan su liderazgo interno la responsabilidad de que sigan vigentes expresiones como "Cádiz-Herzegovina" para referirse a la convulsión crónica del PSOE de la provincia de Cádiz.
Aseguró que es necesario que los compañeros "que juegan al Strategodejen de dar motivos para que nos llamen así, para que se pueda usar esa expresión periodística". Aunque el sarcasmo "Cádiz-Herzegovina" tiene la autoría de José Antonio Griñán. Un micrófono abierto captó la expresión en una visita a la sede local de Cádiz en la década de los 90.