Una fisioterapeuta embarazada denuncia que la agencia sanitaria Bajo Guadalquivir, de funcionamiento autónomo aunque dependiente de la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, la obvia en los procesos de selección de su bolsa de trabajo temporal por encontrarse en estado de gestación. Esta agencia gestiona los Hospitales de Alta Resolución de Utrera, Écija, Morón, Lebrija, La Janda y la Sierra Norte de Sevilla.
La fisioterapeuta en cuestión acabó contrato el pasado 31 de diciembre, aunque previamente desde el departamento de Recursos Humanos del Hospital de Alta Resolución (HARE) de Vejer, en La Janda, le informaron verbalmente de que no le podían adaptar el puesto para poder trabajar sin riesgo, por lo que iban a comunicar a los responsables del proceso de selección que no podían llamarla desde la bolsa de empleo en futuros procesos de selección de toda la agencia. El veto estaría vigente hasta las seis semanas posteriores al parto, previsto para verano, excluyéndola de facto de la bolsa durante los próximos nueve meses, aproximadamente.
El informe médico elaborado por el Área de Prevención y Salud Pública de la agencia sanitaria Bajo Guadalquivir, al que ha tenido acceso lavozdelsur.es, recoge que se encuentra apta para trabajar, aunque “con restricciones”, y que “en caso de no poder desempeñar su actividad laboral en zona no covid, no ser posible adaptar las condiciones de trabajo según el resto de restricciones dadas o no existiese puesto de trabajo o función compatible donde ser reubicada, aconsejamos solicitar la prestación por riesgo durante el embarazo/lactancia”, algo a lo que se niega el organismo adscrito a la Junta, que ni siquiera le permite aceptar un contrato por su imposibilidad para adaptar el puesto.
En la queja interpuesta por la fisioterapeuta ante la dirección gerencia y la dirección de Recursos Humanos de la agencia, consultada por este medio, pide que se le restituya su derecho a “aceptar un contrato, independientemente de mi situación de embarazo, algo que considero una discriminación, máxime en una agencia pública que debe garantizar el derecho de la mujer a trabajar, adaptando si es necesario el puesto con las restricciones recogidas por Medicina Preventiva en su informe médico”. “Mi situación personal no es motivo para que se anule mi derecho como trabajadora a aceptar un contrato, independientemente de que con posterioridad se me reubique o se analice la situación”, agrega.
Este mismo lunes 4 de diciembre se ha incorporado un profesional al Hospital de La Janda con menos puntuación que ella en la bolsa de trabajo temporal del ente, cumpliéndose el aviso que le hicieron desde Recursos Humanos, que le notificó previamente que no la iban a llamar, ya que iba a poner una “anotación” junto a su nombre para que no se le ofertaran contratos por estar embarazada y no poder adaptar su puesto. Fuentes de la agencia, consultadas por lavozdelsur.es, aseguran que “esta mujer estaba cubriendo un contrato de sustitución por baja que tenía de fecha hasta el 31 de diciembre. Antes de que finalice ese contrato (el día 28) sale otro, de dos meses de duración, que no se le puede ofrecer a ella porque tenía en ese momento un contrato vigente. Por ese motivo, dicho contrato nuevo lo coge otra persona que tenía menor puntuación. No se trata de una discriminación por su estado”.
La versión de la agencia contrasta con la conversación mantenida entre la fisioterapeuta y el departamento de Recursos Humanos del HARE de Vejer —que no ha reflejado por escrito que iba a avisar para que no se le ofrecieran contratos, como ella solicitó—, una circunstancia que era conocida por diferentes empleados del centro hospitalario. El régimen de funcionamiento y procedimiento de la bolsa de trabajo temporal de la agencia sanitaria Bajo Guadalquivir recoge entre sus “supuestos no sancionables” el “descanso por maternidad/paternidad, adopción o acogimiento, prestación de riesgo durante el embarazo”.
Satse ya denunció "irregularidades" en la bolsa hace unos meses
Hace unos meses, en mayo de 2020, el sindicato de enfermería Satse alertó de las "irregularidades" detectadas en la bolsa de empleo de la agencia, apuntando que se estaban realizando contrataciones de personal de un listado que "no contiene a todos los inscritos" en la bolsa de empleo del 31 de octubre del 2018, la última en vigor. En el listado, "únicamente se ha baremado a las personas inscritas que en su autobaremo superaban una nota de corte, que además es diferente para cada categoría; en el caso de enfermería estipulado en 80 puntos, una puntuación muy elevada", señalaba el sindicato.
El tribunal que se encargaba de revisar todos aquellos autobaremos que figuran como que han superado los 80 puntos excluye de la baremación al resto, por lo que tras esta revisión "se generan dos listados, uno de los que sí superan esa nota de corte y otra con aquellos que finalmente no lo hacen", explicaban desde Satse. El sindicato decía que se trataba de un listado "parcial", por lo que "no se resolverán las contrataciones que se prevén verdaderamente para las necesidades de la próxima época estival".
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