El Sistema Andaluz de Salud (SAS) tenía, en el año 2022, un total de 20.062 TCAE, es decir, Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería, lo que supone 900 menos que el año anterior. La mayoría trabaja en hospitales, aunque alrededor de un 8% lo hacen en Atención Primaria.
El colectivo de TCAE está muy feminizado, ya que el 90,7% son mujeres, 20 puntos más que en el conjunto del SAS. Asimismo, la ratio de TCAE por cada 1.000 habitantes es de 2,36, lo que se sitúa por debajo de la media española (2,61). Por ello, un estudio de CCOO cifra en 8.000 las profesionales que faltan en el SAS.
El sindicato lleva años reclamando la actualización de las funciones del colectivo de TCAE, su reclasificación en el grupo C1 y su correspondiente incremento retributivo, tal y como se establece en el Acuerdo para una Administración del Siglo XXI suscrito por esta organización sindical. El estudio realizado por la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO se centra, a partir de datos recogidos por 3.000 encuestas, en analizar la situación de estas trabajadoras, visualizar su labor, importancia y condiciones laborales.
CCOO en Andalucía ha llevado a cabo un análisis de la submuestra correspondiente a la comunidad, donde han sido encuestadas más de 700 técnicas en cuidados auxiliares de enfermería. “La dotación adecuada de la plantilla no sólo debe tener en cuenta la ratio por habitantes, sino la razón con el número de enfermeras y ésta se sitúa, según las recomendaciones del Ministerio de Sanidad, en una enfermera por cada TCAE en atención hospitalaria y de tres enfermeras por cada TCAE en Atención Primaria”, incide.
Con base en estos estándares y, según la dotación actual de plantilla, en Andalucía faltan, al menos, 8.352 TCAE, de las cuales 6.637 corresponderían a Atención Hospitalaria y 1.715 a Atención Primaria. Este déficit de profesionales se correlaciona con los resultados hallados en la encuesta: un 50% de TCAE en unidades de hospitalización tienen asignados de 10 a 20 pacientes y el 11% más de 20 pacientes.
“Una ratio de pacientes que casi el 75% de las profesionales considera excesivo. A esto se añade que el 84% manifestó que nunca o sólo a veces se refuerza la unidad teniendo en cuenta las ausencias o las cargas de trabajo. La infradotación, la ratio elevada de pacientes y la falta de refuerzo cuando es necesario permiten explicar que el 35% refiriera que ha estado de baja laboral por lesiones músculo-esqueléticas en los últimos dos años”, añade el sindicato.
El 83% de las TCAE ha contestado a la encuesta asegurando que se ha enfrentado a situaciones emocionalmente intensas o estresantes, un 59% han señalado que había sufrido una agresión y el 21% de las encuestadas haya precisado una baja por estrés laboral o ansiedad en los últimos dos años. “Es también relevante que sólo el 28% de las TCAE afirmen que se sienten reconocidas por su labor por pacientes o familiares”, asevera CCOO.
El sindicato apunta que una de las situaciones que caracteriza a la categoría es que la normativa que regula sus funciones data de un estatuto preconstitucional, totalmente anacrónico y en el que se le asignan algunas tareas claramente sexistas, como han señalado algunos tribunales superiores de justicia. A lo largo de los años, las TCAE han asumido un número muy superior de competencias, siendo éstas, además, cada vez más complejas.
“Exigimos la mejora de las condiciones laborales, lo que conlleva necesariamente revertir la reducción de plantilla y un incremento en el número de profesionales, tanto en Atención Hospitalaria como en Atención Primaria, de más de 8.000 TCAE. También reclamamos una adecuada evaluación de riesgos laborales, incluyendo los riesgos psicosociales, la exención de noches para mayores de 55 años sin pérdida salarial y, como pedimos, para todo el personal de los servicios de salud, la jubilación parcial anticipada y el establecimiento de coeficientes reductores que permitan la jubilación a los 60", insiste CCOO.