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Arañan en el cuello y en el ojo a un médico del SAS por no querer recetar una medicina usada para fabricar droga

El SMA advierte de que el clonazepam es usado para la fabricación de una droga conocida como "karkubi" o "la roja", que, aunque es más común en Marruecos, está empezando a verse en Andalucía

Centro de salud de Camas.
Centro de salud de Camas.
21 de abril de 2025 a las 15:30h

El Sindicato Médico de Andalucía (SMA) ha expresado su rechazo ante un nuevo incidente de agresión a profesionales sanitarios. En esta ocasión, un médico de guardia en la localidad sevillana de Camas fue atacado por una paciente que intentaba obtener de manera irregular la renovación de una receta de clonazepam, un medicamento utilizado en la fabricación clandestina de drogas. El hecho ha sido confirmado por fuentes del Servicio Andaluz de Salud (SAS).

El episodio ocurrió durante el Domingo de Resurrección, cuando la paciente, originaria de otro municipio, acudió al servicio de Urgencias del centro de salud solicitando la renovación de la receta. Al ser informada de que no era posible realizar el trámite en ese momento y que debía gestionarlo a través de su médico de Atención Primaria, la paciente comenzó a mostrar una actitud agresiva. Según el sindicato, la paciente comenzó a elevar el tono de voz, insultando y amenazando tanto al médico como a otros usuarios que se encontraban en las instalaciones.

El facultativo intentó calmar la situación, pero fue agredido físicamente, recibiendo varios arañazos en el cuello y en el ojo. Ante la escalada de la agresión, los compañeros de guardia pidieron la intervención de las fuerzas de seguridad, y tanto la Policía Local como la Policía Nacional se personaron en el centro de salud, procediendo a la detención de la agresora.

Como resultado de la agresión, el médico sufrió una crisis hipertensiva y se vio obligado a abandonar su turno. El Sindicato Médico de Sevilla condenó este tipo de incidentes, subrayando que no son hechos aislados, sino que reflejan una creciente violencia hacia los profesionales sanitarios. El sindicato también destacó que el medicamento en cuestión, el clonazepam, es usado para la fabricación de una droga conocida como "karkubi" o "la roja", que, aunque es más común en Marruecos, está comenzando a circular en Andalucía.

El "karkubi" se produce al mezclar clonazepam con antihistamínicos sedantes, barbitúricos y, en algunos casos, productos tóxicos. Su consumo puede generar efectos peligrosos como desinhibición, alucinaciones, pérdida de control de los impulsos y episodios violentos. Esto no solo pone en riesgo al consumidor, sino también a su entorno, debido a la naturaleza impredecible y peligrosa de la droga.

El sindicato denunció que este tipo de agresiones están aumentando, en parte, debido a la demanda irregular de medicamentos como el clonazepam, que son solicitados por personas involucradas en la producción y distribución de sustancias ilícitas. En este contexto, el SMA hizo un llamado a las autoridades para que refuercen la protección a los profesionales sanitarios y para que se tomen medidas más estrictas frente al tráfico de estos medicamentos utilizados para la fabricación de drogas.

El caso de Camas refleja una situación que cada vez es más frecuente en diversas localidades de Andalucía. La violencia contra los profesionales sanitarios es un fenómeno que preocupa cada vez más, y los sindicatos insisten en la necesidad de garantizar un entorno seguro para quienes trabajan en el ámbito de la salud.

Apoyo del SAS

Por su parte, el SAS ha expresado su apoyo al médico agredido y ha reiterado su compromiso con la seguridad de los trabajadores del sistema sanitario. La intervención de las fuerzas de seguridad en este caso subraya la gravedad de los hechos y la determinación por parte de las autoridades para frenar estos episodios de violencia.

Este suceso ha puesto de manifiesto los riesgos a los que se enfrentan los profesionales de la salud en su labor diaria, especialmente cuando se trata de medicamentos que, aunque son utilizados para fines legítimos, pueden ser desviados para la fabricación de drogas peligrosas.

Sobre el autor

Emilio Cabrera.

Emilio Cabrera

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