Los investigadores de la Universidad de Sevilla Bella Mora y Nicolás Capelo han sido galardonados con el primer Premio Ateneo de Sevilla para Jóvenes Investigadores, gracias a su trabajo sobre neurodegeneración, publicado en la prestigiosa revista Nature Metabolism. Este reconocimiento, en su cuarta edición, se centra en las denominadas enfermedades raras, que afectan a menos de cinco personas por cada 10.000 habitantes.
El jurado, compuesto por expertos internacionales, otorgó la máxima calificación al estudio de Mora y Capelo, seleccionado entre 14 proyectos presentados en esta edición. Su investigación, titulada “La deficiencia del complejo mitocondrial I de la microglía durante el desarrollo induce disfunción glial y letalidad temprana”, aporta nuevas perspectivas sobre las enfermedades primarias mitocondriales, una de las causas de desórdenes del neurodesarrollo.
El trabajo sugiere que la microglía, un tipo de célula inmunitaria del sistema nervioso, desempeña un papel más relevante de lo previamente conocido en estas patologías. Además, identifica a la mitocondria como una posible diana para modular la función de estas células. Esto podría abrir nuevas estrategias terapéuticas no solo para enfermedades raras de origen mitocondrial, sino también para patologías neurodegenerativas más prevalentes, como el Alzheimer.
Bella Mora, natural de Cartaya (Huelva) y nacida en 1998, inició su carrera académica en 2016 al cursar Biomedicina Básica y Experimental en la Universidad de Sevilla. Tras finalizar sus estudios en 2020, completó un Máster en Investigación Biomédica y, en 2022, comenzó su tesis doctoral con un contrato predoctoral de la Junta de Andalucía. Su investigación se desarrolla en el laboratorio de Alberto Pascual, en el Instituto de Biomedicina de Sevilla (IBiS), bajo la supervisión de Pascual y el profesor Juan José Pérez Moreno.
Mora ha realizado estancias de investigación en las universidades de Cambridge y Edimburgo, financiadas por programas como Erasmus Prácticas y la Federación Europea de Sociedades de Neurociencia. Durante su etapa predoctoral, ha presentado su trabajo en numerosos congresos nacionales e internacionales, consolidándose como una joven investigadora con proyección internacional.
Por su parte, Nicolás Capelo, nacido en Moguer (Huelva) en 1996, finalizó en 2020 sus estudios en Farmacia y Óptica y Optometría, también en la Universidad de Sevilla. Durante su formación, recibió diversos premios al mejor expediente académico por instituciones como la Real Maestranza de Caballería de Sevilla y el Colegio Oficial de Ópticos-Optometristas de Andalucía.
Tras cursar un Máster en Investigación Biomédica, Capelo inició su trayectoria investigadora con un contrato FPU del Ministerio de Universidades. Su trabajo se centra en el metabolismo de los trastornos neurodegenerativos, bajo la supervisión de Javier Vitorica y Alberto Pascual en el Instituto de Biomedicina de Sevilla.
El reconocimiento internacional de Capelo incluye la publicación de su primer artículo en Nature Metabolism y su participación en importantes congresos científicos. Además, ha realizado estancias de investigación en el extranjero, financiadas por programas como la ECTP-FENS en Viena y la IMFAHE Fellowship en Boston, donde ha establecido colaboraciones clave para su carrera.
El Premio Ateneo de Sevilla subraya la importancia de este tipo de investigaciones, que no solo avanzan en la comprensión de las enfermedades raras, sino que también tienen un impacto potencial en el desarrollo de terapias para patologías de gran incidencia.
La investigación premiada destaca la relevancia de la mitocondria en la función de la microglía, ampliando el conocimiento sobre las causas subyacentes de los desórdenes del neurodesarrollo. Este avance podría sentar las bases para futuras estrategias terapéuticas dirigidas a estas enfermedades.
La entrega del galardón pone en valor el papel de los jóvenes investigadores en la producción científica y reafirma la apuesta de instituciones como el Ateneo de Sevilla por fomentar la investigación de excelencia. Para Mora y Capelo, este reconocimiento supone un estímulo para seguir avanzando en su trabajo en un campo que podría transformar el tratamiento de enfermedades con alta carga social y sanitaria.
El estudio premiado no solo abre nuevas líneas de investigación en enfermedades mitocondriales, sino que también consolida a estos jóvenes científicos como referentes en el ámbito de las neurociencias, marcando un camino prometedor para la próxima generación de investigadores.