El presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, ha alertado este jueves de que las comunidades se quedarán "desnudas" para tomar decisiones tras la caída del estado de alarma a partir del 9 de mayo, según anunció el jefe de Ejecutivo español, Pedro Sánchez. En declaraciones a los periodistas en el Parlamento, Moreno ha mostrado su preocupación por que el presidente del Gobierno ha dejado "pasar un año de pandemia sin hacer una regulación básica en materia sanitaria que permita a las comunidades tener instrumentos legales para tomar decisiones importantes" en una situación sin estado de alarma.
En su opinión, la pregunta es si a partir del 8 de mayo hay un rebrote de la pandemia en cualquier territorio de España y no existe toque de queda y las comunidades no pueden legislar en materia de movilidad de las personas ni pueden tomar decisiones, "qué va a pasar". Ha alertado de que, sin toque de alarma, se puede dar el caso de que algún municipio plantee la celebración de una feria o romería o se convoque un gran botellón y las comunidades no tendrán instrumentos para abordar esa situación.
"Nos quedamos desnudas ante un posible rebrote de la pandemia que nadie quiere, pero que si ocurre, tenemos que tener una previsión", ha dicho Moreno. Por tanto, según ha insistido, nos encontramos ante una "pérdida de tiempo por parte del Gobierno central" por no haber previsto una regulación básica y con una situación de "improvisación con la pandemia, que genera inseguridad y un cierto desencanto" en la ciudadanía.
El Gobierno, sin embargo, insiste en que la única restricción que no podrá aplicarse cuando decaiga el estado de alarma es el confinamiento domiciliario al estilo del que hubo en España entre marzo y junio. Una situación que sorprende, toda vez que efectivamente el Gobierno aprobó la alarma en la segunda ola cuando señalaba que no aplicaría el confinamiento, pero que en todo caso era necesario.
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