"Llevo en Urgencias con mi hija desde esta tarde. Llevamos más de dos horas que pasamos el triaje y que no sabemos absolutamente nada. La sala de espera está a reventar de gente". Este es el testimonio de Violeta Márquez, una madre que acudió en la tarde del jueves a las Urgencias Pediátricas del Hospital de Jerez, donde el panorama era desolador: "Una sala llena de niños y niñas con algún tipo de problema médico: tos, fiebre, gastroenteritis… Ni que decir tiene el riesgo que supone estar aquí esperando entre tanta enfermedad. Niños cansados de esperar y sin poder llegar a comprender qué pasa".
Su hija, de casi cuatro años de edad, se encontraba con un cuadro de fiebre desde hace días y una tos permanente. "Aquí hay muchos como ella. Y peor. Llantos, gritos e impaciencia entre los menores. Es espeluznante", relata Violeta.
"No puedo llegar a entender cómo es posible que estemos en esta situación. No puedo llegar a entender cómo la gente no se levanta contra el desastre instaurado en la Sanidad Pública Andaluza. No puedo llegar a entender cómo se acepta y se normaliza que para ser atendidos, algo mucho más preocupante cuando de niños pequeños se trata, hay que esperar hasta desesperar", destaca esta madre.
Y tras la larga espera, como ocurre en muchas ocasiones y como resalta Violeta, "solo faltará que cuando llegue nuestro turno, el o la pediatra que la vea nos atienda rápido y mal porque está saturado. Es una auténtica vergüenza".