La respuesta de un TCAE del Hospital de Jerez a la consejera de Salud tras negar la precariedad laboral

Rocío Hernández ha afirmado que no ha recibido ninguna denuncia sobre la situación de los profesionales en el centro hospitalario. "Tenemos que llevar luces de minero para atender a los pacientes", afirma Humberto Otero

La consejera de Salud, Rocío Hernández, en una imagen reciente.
La consejera de Salud, Rocío Hernández, en una imagen reciente.

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El PSOE ha llevado al Parlamento andaluz la "precariedad laboral acuciante" del Hospital de Jerez. Algo que ha sido negado por la consejera de Salud, Rocío Hernández: "No se ha recibido ninguna denuncia sobre precariedad laboral". 

Según la consejera, no hay falta de neurólogos en el referido hospital y el personal no está exhausto ni se siente maltratado por la ausencia de recursos. 

La parlamentaria socialista Irene García, que ha lanzado la pregunta sobre la precariedad laboral en el Hospital de Jerez, ha acusado a la consejera de "vivir en un mundo paralelo". 

"El Hospital de Jerez viene sufriendo esta precariedad de una forma acuciante. Los profesionales sanitarios ya no pueden más. El ejemplo más grave es lo que está ocurriendo en la unidad de ictus, que era una unidad de éxito y que tiene numerosas bajas. Y han tratado de traer a neurólogos del Hospital de Cádiz para cubrir las bajas de Jerez. Desvestir un santo para vestir otro", ha añadido García. 

"Estado deplorable de la sanidad pública"

La negativa de la consejera de Salud ha obtenido respuesta por parte de algunos profesionales del sector sanitario, como Humberto Otero, que trabaja como TCEA (técnico en cuidados auxiliares de enfermería) en el Hospital de Jerez. "Tenemos que calentar agua para asear, llevar luces de mineros para poder atender a los pacientes y un largo etcétera. A lo mejor es usted de las que cree que tampoco hay cambio climático o que la Virgen fue fecundada por una paloma", ha indicado a la consejera este profesional. 

"Cuando quiera usted le hago un tour por la unidad y si en ese momento se activa el código ictus verá a los profesionales trabajar in situ. Otra cosa, el teleictus es una buena herramienta como complemento a una asistencia, mientras que el personal cualificado no puede atender al paciente hasta que llega al hospital, pero a partir de ahí tenemos que atenderlo personalmente y no por teléfono. O a lo mejor ha pensado usted que también puede poner usted en marcha el teleaseo, telecuras, telefribrinolisis...", ha resaltado Humberto Otero en sus redes.

La crítica de este sanitario va a más: "Tal vez así se podría ahorrar el SAS más en personal, vendiéndose unos kits en los hospitales privados que les gustan a usted, y así el enferme se hace la teleasistencia a sí mismo. Me parece deplorable que estén llevando la sanidad pública a una situación en la que las guerras que por desgracia tenemos en el mundo tengan mejores recursos que el personal sanitario del SAS". 

 

Sobre el autor:

R. G.

Periodista con más de veinte años de experiencia en los medios de comunicación (prensa escrita, digital, radio y televisión). Autor de nueve libros, entre los que se encuentra Nosotras. Historias del olvidado deporte femenino, obra pionera en España. Premio Racimo por la Igualdad por la defensa del deporte femenino, Premio Apoyo al Deporte en la III Gala del Deporte de Jerez, mención especial en el V Premio de Periodismo Positivo de Ávila y Premio Almería para Todos por la lucha contra el acoso escolar en los medios de comunicación. Recuperando la ilusión por el periodismo en lavozdelsur.es.

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