El sindicato de enfermería Satse ha denunciado la falta de fisioterapeutas en la sanidad pública española y reclamada que todas las consejerías de Sanidad aumenten sus plantillas en hospitales y centros de salud.
En nuestro país hay 68.838 fisioterapeutas colegiados, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2023. La ratio recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) es de un fisioterapeuta por cada 1.000 habitantes. En el sistema sanitario público español la ratio es de 0,1 fisioterapeutas por 1.000 habitantes (un fisio por cada 10.000 personas).
Estos profesionales son figuras claves en el sistema sanitario teniendo en cuenta el progresivo incremento del número de personas de edad avanzada, su labor en la reducción de los postoperatorios y el aumento de los problemas osteomusculares y de las lesiones provocadas por la actividad física o el ritmo actual de vida.
La falta de fisioterapeutas en la sanidad pública hace que las listas de espera se colapsen y haya que esperar meses para ser atendidos por un profesional. Sin fisioterapeutas, muchas personas tienen que costear de su bolsillo un tratamiento que puede oscilar, según Satse, entre los 400 y 600 euros por diez sesiones (el coste medio de una sesión oscila entre los 40 y 60 euros).
Debido al déficit estructural de plantillas existentes en la sanidad pública, los profesionales de la fisioterapia, como apunta el referido sindicato, se ven obligados a trabajar de forma mayoritaria en centros privados o de manera autónoma.
Satse pone de manifiesto que esta realidad "provoca una clara desigualdad y discriminación para todas las personas que no pueden destinar estas cantidades económicas si necesitan recibir una atención que deberían tener garantizada dentro de nuestro sistema sanitario público".