En la defensa a ultranza que vienen haciendo Partido Popular y Ciudadanos sobre el estado de la sanidad andaluza, los partidos del Gobierno andaluz cada vez tienen menos apoyo. De hecho, ni siquiera Vox, principal sustento de Moreno Bonilla, se cree las cifras de sanitarios que el presidente ofreció este martes tras el Consejo de Gobierno.
Durante la tarde del martes, salieron al paso los sindicatos para desmentir las afirmaciones de Moreno Bonilla sobre las contrataciones donde aseguraba que el 91% de los 8.000 sanitarios despedidos habían vuelto a ser contratados. Desde la Unión General de Trabajadores, el secretario de Sector Salud, Antonio Macías, indicó que los únicos contratos realizados por el Servicio Andaluz de Salud fueron “para sustituir las vacaciones reglamentarias de los compañeros en Navidad”.
Por su parte, el secretario general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Andalucía (FSS-CCOO Andalucía), José-Pelayo Galindo, afirmó a Europa Press que “no se creen” los números presentados por el Gobierno. Además, el representante de CCOO indicó que no cuadraba la renovación de tantos profesionales con que se “establezcan instrucciones para que los enfermeros echen horas extraordinarias para cubrir las necesidades de atención primaria”.
Durante la tarde del martes, eldiario.es publicó que la Junta de Andalucía había propuesto a los médicos de la Atención Primaria doblar turnos y realizar jornadas de 12 horas. Este hecho se suma a la petición de la consejería de Salud hacia los sanitarios jubilados para que se reincorporasen. Este llamamiento del Gobierno sólo encontró la respuesta positiva de un jubilado.
A estas críticas se ha sumado hoy la formación que lleva apoyando a Moreno Bonilla durante toda la legislatura. El portavoz de Vox, Manuel Gavira, ha señalado que todos los andaluces saben que Salud Responde, no responde y “las listas de espera que hay cuando uno necesita operarse”. Gavira ha tachado la sanidad andaluza de “caos” y calificado al Gobierno de “incapaz”.
De hecho, el actual líder de la ultraderecha en Andalucía ha afirmado que la cuestión es “aún más grave” en caso de que “las cifras fueran ciertas”. Gavira ha manifestado que, si los datos fueran los que expresó Moreno Bonilla durante su intervención “significaría que este Gobierno es incapaz de gestionar la sanidad en Andalucía”.
El PSOE pide la comparecencia de Jesús Aguirre
La portavoz socialista, Ángeles Férriz, ha acusado a Moreno Bonilla de mentir. Desde las filas socialista denuncian que no es cuestión “de lo que diga” Moreno Bonilla, sino de “lo que la gente está viviendo”. Férriz insiste en que se trata de un plan “premeditado” por parte del Gobierno de PP y Ciudadanos para “deteriorar” la sanidad pública y “favorecer la sanidad privada”. La jienense, incluso, ha mostrado su aplicación personal de Salud Responde para demostrar que la primera cita disponible – telefónica – es para el 24 de enero.
El PSOE ha solicitado un pleno extraordinario para que el consejero de Salud, Jesús Aguirre, dé explicaciones sobre la situación actual que vive la sanidad andaluza en su conjunto y la Atención Primaria en particular. Férriz califica de “sorprendente” que haya que esperar hasta el primer pleno del periodo de sesiones, en la segunda semana de febrero, para que comparezca Aguirre.
Los socialistas creen que no todas las comunidades “están igual”, como defiende muchas veces la Junta, “porque muchas contratan a los sanitarios andaluces y aquí se les despide”. Juan Espadas ha vuelto a solicitar una reunión con Moreno Bonilla, al que Férriz ha definido como “soberbio” por rechazarla. Además, la portavoz ha acusado al presidente de contradecirse, al afirmar que habían regresado el 90% de los sanitarios despedidos mientras supeditaba las contrataciones a un fondo covid por parte del Gobierno central y Juan Marín señalaba “que no eran necesarios”.
El Partido Popular defiende que en 2018 la situación estaba peor
José Antonio Nieto, portavoz del grupo parlamentario popular, ha continuado la senda marcada por la Junta de Andalucía, que dirige su partido, durante la comparecencia tras el Consejo de Gobierno. Nieto, en sede parlamentaria, ha defendido que la situación es mejor que en 2018, cuando gobernaba el Partido Socialista.
Para sostener su tesis, ha mostrado algunas fotos de aquella época en la que se veían las Mareas Blancas o salas de espera de ambulatorios llenas. Sin embargo, Nieto asegura que los 8.000 sanitarios “no se despidieron” sino que “no se renovaron” y lo achaca a la falta de un fondo covid por parte del Gobierno central. Además, Nieto ha manifestado que si la pandemia remite y hay actividades que son prescindibles, “no se va a mantener a un personal innecesario”.
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