La juez del Juzgado de Instrucción Nº 3 de Jerez de la Frontera ha archivado el caso del supuesto caso de espionaje denunciado por la exalcaldesa Mamen Sánchez y su delegada de Recursos Humanos, Laura Alvarez, contra dos funcionarios municipales por ausencia de indicios delictivos.
El escrito lo firma uno de los funcionarios investigados, Nausika Botamino, número once en la lista del PP en aquel momento y, además, delegada sindical de CSIF. "Esto, que se sabía desde el principio, ha sido confirmado ahora por la Justicia. Una persecución sin precedentes que supuso una cacería que ha concluido por dictado judicial tres años y medio después".
La funcionaria quiere poner de manifiesto, en esta comunicado de prensa, que "por fin de se hace justicia contra la persecución sindical y personal, sin precedentes, ejecutadas por ambas políticas del PSOE, quienes durante sus mandatos en el Ayuntamiento de Jerez se caracterizaron por la nefasta política en materia de recursos humanos llevada a cabo y que pretendían ocultar con este tipo de acciones".
Botamino afirma que durante más de tres años y medio ha vivido "un auténtico calvario, por el abuso de poder de ambas", ya que su puesto de trabajo y de otro compañeros estaban en peligro, por no hablar de cómo le ha afectado la situación vivida a ella misma y su familia, Nausika Botamino se pregunta" quién pagará ahora la utilización de los recursos públicos en este juicio que ha puesto de manifiesto que era una persecución personal orquestada por el Gobierno del PSOE" contra su persona.
En diciembre de 2020, el Ayuntamiento de Jerez presentó una denuncia contra Nausika Botamino y otro empleado municipal, acusándolos de acceder ilegalmente a documentos confidenciales municipales. El auto de archivo, emitido el 18 de junio de 2024, establece "que las acusaciones eran infundadas y no se sustentaban en pruebas concretas. La jueza determinó que no existía indicio alguno para considerar que se había cometido un delito. Esta resolución pone fin a una situación de injusticia que ha afectado profundamente a Botamino durante más de tres años", afirma.
"Me han hecho sentir como una delincuente cuando no había cometido ningún delito. La resolución judicial demuestra mi inocencia y la de mi compañero, por el que siento más todo lo ocurrido que por mi misma, y pone fin a una injusticia que nunca debió haber ocurrido", afirma Nausika.
Botamino también quiere agradecer a sus compañeros del Ayuntamiento de Jerez "el apoyo y presión sindical" para detener el expediente disciplinario con el que pretendían despedirla antes de presentar la denuncia penal. "Sin el respaldo de mis compañeros, esta persecución sindical podría haber tenido consecuencias aún más graves para mi vida profesional y personal y la de mi compañero también denunciado. Los empleados municipales del Ayuntamiento de Jerez, no son solo grandes profesionales, además son grandes personas. Tengo los mejores compañeros del mundo y les estaré eternamente agradecida", dice.
Nausika Botamino exige ahora una rectificación pública por parte de las autoridades implicadas, "especialmente por parte de Laura Álvarez, que en su día se mostró especialmente vehemente anunciando la denuncia y efectuando declaraciones públicas muy duras, contra la que estudia emprender acciones legales". La empleada municipal espera que esta rectificación se realice "en los mismos canales y con la misma visibilidad que tuvieron las acusaciones iniciales".