Un pasajero que iba a bordo de vuelo de Ryanair entre Málaga y Manchester ha fallecido en pleno viaje, lo que ha obligado al piloto a realizar un aterrizaje de emergencia.
El hombre, de nacionalidad británica, se sintió indispuesto y fue sometido a una reanimación cardiopulmonar, sin éxito, realizada a más de 38.000 pies de altura, según el periódico inglés Mirror.
La muerte del pasajero provoca que se realice un aterrizaje de emergencia en Burdeos, en Francia. En el avión se vivieron momentos de pánico, con algunos pasajeros desmayándose, incluso.
Varios niños que iban en el avión se mostraron "confundidos y alterados" ante el suceso, que provocó momentos de tensión durante el vuelo.
La Oficina de Asuntos Exteriores, Commonwealth y Desarrollo (FCDO) de Reino Unido confirma que la familia del pasajero fallecido está recibiendo apoyo de las autoridades.
"Preguntaron si alguien tenía capacitación médica a bordo. Tuvimos que hacer un aterrizaje de emergencia en Burdeos y un pasajero a nuestro lado realizó RCP durante todo el aterrizaje, pero desafortunadamente no lo logró", asegura una de las pasajeras del avión.