Aunque Bertín Osborne tenía ya fecha para acudir al Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses para realizarse las pruebas de paternidad que confirmasen (o no) si es el padre del bebé que tuvo Gabriela Guillén en diciembre del año pasado, el artista no se someterá a dichas pruebas.
Sus abogados han expresado que el cantante considera innecesario la realización de las pruebas de paternidad una vez que "ya ha reconocido su responsabilidad sobre el menor". Han añadido además que "la finalidad de estas pruebas estaba directamente relacionada con el reconocimiento de esta responsabilidad, un hecho que se ha producido hace semanas".
El motivo que argumentan desde el despacho de abogados que representa jurídicamente a Osborne está en "la protección del menor". En este sentido, los abogados de Bertín han apuntado que "tal y como se avanzó en el comunicado en el que asumió la responsabilidad sobre el menor, se estima que lo más importante es la protección del mismo, por lo que, a las razones argumentadas, se unen las de intentar preservar al máximo su intimidad. Cualquier nueva cuestión sobre este asunto, genera un impacto mediático inevitable, que va en contra, precisamente, de este objetivo”.
El equipo legal del cantante ha insistido en el deseo de Bertín de "mostrar la máxima responsabilidad con el menor".