El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales ha entrado a las 11.10 horas en la sede de la Audiencia Nacional situada en la calle García Gutiérrez para declarar como investigado por el beso en la boca que propinó a la jugadora de la selección Jenni Hermoso en la entrega de trofeos del Mundial en Sidney.
Rubiales ha negado ante el juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge coacciones y falta de consentimiento en el beso que propinó a la jugadora. Asimismo, el expresidente ha contestado a las preguntas de todas las partes durante los cerca de 45 minutos de su declaración como investigado.
La Fiscalía, por su parte, ha pedido que se le prohíba acercarse a menos de 500 metros de Hermoso y comunicarse con ella durante la instrucción de la causa. Además, el Ministerio Público ha pedido al titular del Juzgado Central de Instrucción Número 1 que Rubiales deba comparecer cada quince días en el juzgado más cercano.
Rubiales ha acudido este lunes al tribunal andando junto a su abogada, la letrada Olga Tubau, y han recorrido juntos el pasillo hasta la entrada del mismo, donde esperaban en torno a un centenar de periodistas. Sin embargo, ha rechazado contestar a las preguntas de los medios de comunicación.