'La gran ola', el documental sobre otro posible tsunami en Cádiz y Huelva que nadie quiere ver

Agua entrando sin control en un chiringuito de las playas urbanas de la capital gaditana. FOTO: Juan Carlos TORO

“¡Hasta aquí, Madre Mía!”, gritaron. Y las aguas comenzaron a retroceder milagrosamente. Es la leyenda que dicta en Cádiz que la Virgen del Rosario impidió, en 1755, que miles de gaditanos perecieran ahogados ante el maremoto que sacudió a la costa gaditana, con olas de hasta quince metros de altura, y que pasó a ser conocido como el Terremoto de Lisboa, pues en la capital lusa alcanzó los 9 grados de magnitud en la escala Richter y es considerado todavía uno de los más destructivos de la historia europea.

El obispo de Cádiz en aquella época, fray Tomás del Valle, escribía una epístola en los días después a la tragedia, que en Cádiz costó la vida a una quincena de personas: "Después de la terrible, espantosa y a nuestros ojos jamás vista tormenta del temblor de tierra, y enfurecida braveza del mar, en cuyos aparatos y horribles efectos llegamos a temer el sábado próximo, no sin fundamento, el que a Cádiz se lo hubiese tragado este voraz cristalino golfo; provida la Iglesia nuestra madre, aún no bien calmado el susto, y vistiéndose del espíritu que la anima, salió al encuentro a nuestras aflicciones". La realidad, tanto tiempo después, es que algo así es tan probable que ocurra hoy mismo como dentro de 100 años. "Si olvida esto estará cometiendo un grave error: el mismo que cometimos en el pasado". De hecho, ya sucedió muchas veces más antes de 1755. Se da por seguro que Baelo Claudia fue arrasada por un tsunami, y hay evidencias arqueológicas y documentales que lo demuestran.

Como sintetizan los expertos, ni un maremoto de estas dimensiones es fruto del azar, ni hay duda alguna de que se vaya a repetir. A muchos se les ha venido estos días, al ver el aluvión de imágenes devastadoras y de cómo el mar se hacía con todo a su paso en la costa gaditana, el documental La gran ola, digirido por Fernando Arroyo y que puede verse en #0, de Movistar +, la primera ventana en televisión que muestra la realidad sobre los tsunamis en la Península Ibérica. En el mismo, una de las voces expertas a las que se recurre es taxativa. Begoña Pérez, jefa de la división de Oceanografía de Puertos del Estado, afirma: "La pregunta no es si va a haber o no un tsunami, la pregunta es cuándo va a ocurrir el próximo tsunami".

https://youtu.be/02MtjyBDSHg

El director de La Gran Ola ya explicaba cuando se estrenó que el documental muestra una verdad "que a todos da miedo escuchar", por lo que aseguraba que "no debemos mirar a otro lado". "Si lo que plantea la comunidad científica ocurre, estaremos ante una de las mayores catástrofes de la historia: un tsunami con olas de entre cinco y 15 metros que en apenas un cuarto de hora llegaría a las costas ibéricas". En este sentido, Fernando Arroyo afirma que el documental muestra "una realidad de la que hasta ahora nadie ha querido hablar, si exceptuamos algunos científicos o instituciones como el Instituto Español para la Reducción de Desastres".

 "La pregunta no es si va a haber o no un tsunami, la pregunta es cuándo va a ocurrir el próximo tsunami"

"Ese tsunami en las costas andaluzas se va a repetir y la gente vive sin saberlo, no lo puedo entender, no puedo entender quién tiene el valor para decir esto es espantar a la sociedad, es como tratarla como si fuéramos idiotas". Este otro testimonio no es el de cualquiera. A esta reflexión pone voz María Belón, superviviente del tsunami de 2004 en Tailandia, y cuya experiencia milagrosa se recoge en la película de J. A. Bayona Lo imposible. Una verdad que ha estado oculta durante muchas décadas: el riesgo real que existe en España de que se repitan tsunamis de grandes proporciones. Ya los ha habido en diferentes épocas... ¿por qué tendríamos que pensar que no se va a repetir en el futuro? Bajo este punto de partida, el documental, rodado en España y Portugal, cuenta con casi 40 entrevistas a científicos, funcionarios expertos, políticos, cargos públicos, rescatadores (BUSF), representantes de ONG..., de diferentes países.

Asimismo, en un espectacular despliegue audiovisual, recoge imágenes aéreas de la costa, recreaciones virtuales de futuros tsunamis y grabación de imágenes de las playas y ciudades son otros de sus atractivos. En apenas una hora de duración, las voces autorizadas que en el trabajo reflexionan en torno a esta amenaza real deja poco lugar a la duda: hay demasiada relajación en las autoridades y falta prevención e información entre los posibles afectados por un maremoto que llegaría en 15 minutos a la costa.

María Eugenia Petit Breueil, profesora de Historia de América (US) y experta en catástrofes históricas, insiste: "Podemos decir que (los tsunamis) se han repetido y se repetirán, soy de Historia, pero conozco la máxima geológica de que cada vez que hay un desastre se repetirá; y eso no lo podemos olvidar, no podemos pensar que ocurre un desastre y nunca más vaya a ocurrir". En caso de que ocurra, cuestiona Antonio Pazos, jefe del servicio de Sismología del Real Observatorio de la Armada, "cuánta gente hay en las costas de Cádiz y Huelva, cómo evacuamos y sacamos de la playa a toda esa gente a un sitio seguro, además en una zona baja de mucha marisma. En Cádiz, donde hay solo dos salidas (la entrevista se produce antes de la inauguración del 'segundo puente'), cómo se saca a 100.000 personas en media hora; eso es imposible, dónde nos refugiamos, a dónde hay que ir, tampoco hay muchos sitios". Y lo peor es que hay certezas científicas de que volverá a pasar. "Sabemos que se puede repetir, donde el famoso terremoto de Lisboa todos los días hay terremotos, es una zona activa, no podemos saber muy bien qué periodo de retorno hay, cada cuánto tiempo ocurren esos tsunamis para establecer una pauta de comportamiento", expone Emilio Carreño, director de la Red Sísmica Nacional.

"La gente vive sin saberlo, no lo puedo entender, no puedo entender quién tiene el valor para decir 'esto es espantar a la sociedad', asegura María Belón, superviviente en Tailandia

Así ha quedado Puerto Sherry al paso del 'Emma'. No solo Cádiz debería estar alerta ante estos fenómenos sísmicos. FOTO: Juan Carlos TORO

Como recoge el documental, en alta mar, las ondas de un tsunami alcanzan una velocidad de 700/800 kilómetros por hora, "sensiblemente la velocidad de un avión comercial". Se propagan de una forma muy rápida, pero cuando la profundidad del fondo marino se reduce, lo que ocurre es que se provoca "un aumento de la altura de la columna de agua y ahí sí ocurre normalmente (...) que cuando esas olas se aproximan a zonas costeras ganan una energía que es visible por la forma del aumento de la altura del agua". Por eso está en la memoria colectiva aquellas olas de unos 15 metros de altura hace más de 250 años. ¿Cuándo se repetirá? En La gran ola se explica que "el periodo de retorno es una mera estadística sobre la que no hay acuerdo (de 250 a 2.500 años), y es más incorrecta cuantos menos tsunamis se conozcan".

Los investigadores encontraron siete en Cádiz; en Huelva, 14, todos datados científicamente, mientras que en Portugal ninguno, pero evidentemente los ha habido. "Si alguien ve en este baile de cifras algo positivo, tenemos que darle una mala noticia: la incertidumbre científica es síntoma de que estamos en riesgo inminente, en eso sí que están de acuerdo todos los expertos", reza la voz en off del documental, que deja claro que "lo importante es entender que el problema jamás podrá ser resuelto, la corteza terrestre está en constante actividad". De ahí, quizás, que en su arranque se sobreimpresione la frase de Ernest Renan: "La clave de la educación no es enseñar... es despertar".

"Es un tema tan peliagudo y tan grave que uno piensa que los gestores quieren dejarlo a un lado y que sea otro el que se ocupe, pero como en otras catástrofes recientes, no podremos decir que no sabíamos nada o que fue la naturaleza la que sorpresivamente nos atacó, tarde o temprano nos afectará y el conocimiento que se tiene sobre este fenómeno es ya muy avanzado, se tiene mucha información, y que no se tomen medidas ya forma parte de la negligencia, del miedo o de la incompetencia", concluye Francisco Javier García, profesor de Ciencias de la Tierra en la Universidad de Cádiz. "¿Qué pasará cuando se repitan los tsunamis que en el pasado han asolado las costas de España y Portugal?", se pregunta el director del filme documental. Y añade: "Aquí, al igual que en el Índico antes del 2004 no se quiere hablar de este tema, probablemente porque piensan que se espantaría al turismo y a la población. Esa es la principal similitud con el caso de María Belón: no se hace nada aunque se conoce el riesgo".