Rafael Muñoz Leonisio lleva años soltando exabruptos en sus redes sociales, que ahora han desaparecido tras hacerse noticia los graves insultos proferidos contra miembros del Gobierno y miembros de partidos de izquierdas. El intendente jefe de la Policía Local de El Puerto pidió perdón con la boca pequeña, tras solicitárselo el gobierno local, en manos de PP y Cs, tras lo que ha borrado todo rastro digital. “Quiero mostrar mis más sinceras disculpas y arrepentimiento si he podido con mis comentarios insultar o faltar el respeto a alguien, o si alguien se ha podido sentir ofendido con mis comentarios personales", señaló en un comunicado que estuvo solo unas horas en Facebook.
Eso sí, matizaba: “No puedo ni soy capaz de pedirlas por expresar bandera al cuello mi disconformidad con la gestión que se ha realizado en la gestión del Covid-19 a nivel nacional”. "Y no puedo hacerlo porque me asiste un derecho fundamental de libertad de expresión como ciudadano de pleno derecho de lo que considero un sistema democrático y constitucional, independientemente de mi ideología o simpatías políticas”. El agente animó a participar en las manifestaciones contra el Gobierno, en las que participó activamente.
Rafael Muñoz Leonisio ejerce como intendente mayor jefe de la Policía Local de El Puerto de facto al ser el número dos de la Jefatura en el momento de fallecer en un accidente el anterior, Manuel Cuenca, pero desde noviembre de 2017 se encuentra vacante la plaza. La Federación de Empleados de Servicios Públicos de UGT pidió a finales de 2018, cuando era alcalde el socialista David de la Encina, que se eliminara de la RPT (Relación de Puestos de Trabajo) la plaza de intendente mayor de la Policía Local, dotada con más de 60.000 euros anuales, aunque a día de hoy sigue existiendo.
La lengua viperina del agente ha sido noticia en anteriores ocasiones, como cuando llamó “piojosos” a los manifestantes que se concentraron tras las elecciones andaluzas en las que Vox irrumpió en el Parlamento autonómico. “Esta tarde 70 piojosos han estado ladrando en la plaza Peral en contra de la democracia, al más puro estilo leninista bolivariano. Al terminar los ladridos se ha procedido a fumigar la plaza para evitar contagios a la ciudadanía”, escribió en redes sociales. Hasta ahora no había tenido consecuencias. La teniente de alcalde de Policía Local y Personal del Ayuntamiento, Marina Peris, fue quien le exigió que se disculpara, y anunció la apertura de expediente por si esta conducta tuviera responsabilidad administrativa para el ejercicio de su puesto en la Policía Local. Además, la Policía Nacional ha abierto diligencias para esclarecer los hechos y determinar si son constitutivos de un delito.
Partidos como el PSOE, y numerosas organizaciones sociales, han pedido la dimisión de Muñoz Leonisio. El Ayuntamiento portuense agrega que no puede cesarlo porque “no está nombrado por el sistema de libre designación, motivo por el cual no puede ser cesado por pérdida de confianza, ya que es un puesto de funcionario de la Administración”. El PSOE critica las "expresiones homófobas” proferidas por el agente, “queriendo atacar al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, pero insultando a todas las personas homosexuales”, en referencia al meme compartido por el policía, en el que se ve a varios hombres con arnés de cuero y sin camiseta, y donde se puede leer: “Marlaska reestructura la cúpula de la Guardia Civil con personal de confianza”.
El agente, que no oculta su ideología política, se despachó en las últimas semanas en su perfil personal vertiendo una serie de insultos y descalificaciones a miembros del Gobierno, al director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, o a todo dirigente político de izquierdas que se le ponga en su camino. Muñoz Leonisio, además, no oculta que participa en las manifestaciones convocadas contra el Ejecutivo central. “En el Parque Amarillo en El Águila, todos los días a las 21:00 salimos en grupo de 10 a pasear. Cada vez somos más grupos”, escribe. Y hasta critica que la Guardia Civil disuelva una de ellas: “Esto es un atropello contra el derecho fundamental a la libre circulación. Las órdenes manifiestamente ilegales cómo estás no deben ser acatadas, ya que si lo son, el propio agente puede incurrir en delito de prevaricación. Vamos camino de una dictadura social comunista”.
El agente de Policía Local portuense también comparte frases de José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange Española, recogiendo que “la revolución es necesaria” o que “frente a la política social comunista, la política de salvación nacional”. “Tus esclavos te obedecen Herr Fraude (sic)”, escribe junto a una imagen de Pedro Sánchez, con un bigote como el de Adolf Hitler. “Un carajo para ti trilero de mierda”, le dedica también al presidente del Gobierno. A la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, la llama “hija de puta”, entre otras calificaciones despectivas.
Hace unos años también fue noticia su polémica actuación en la retirada de una sanción a un miembro del PP del gobierno local de El Puerto. “El hecho de devolver el vehículo a una autoridad municipal, al igual que si la misma fuese autonómica o del Estado, así como a los agentes de la autoridad y servicios de emergencia, siempre y cuando todos ellos se encuentren en funciones de servicio o en el ejercicio de sus obligaciones, ha sido siempre y sigue siendo una práctica habitual”. Rafael Muñoz Leonisio, intendente jefe de la Policía Local de El Puerto, justificaba así la retirada de una sanción al delegado de Cultura del Ayuntamiento. Era 2011 y Millán Alegre, el edil en cuestión, se libró en primera instancia de la multa a pesar de que su vehículo tuvo que ser retirado de la vía pública porque impedía el giro de un autobús urbano.
Un informe policial firmado por Muñoz Leonisio recogía que la decisión de “perdonar” la sanción al edil popular era suya, haciendo una interpretación muy personal de un artículo de la Ley de Haciendas Locales. El intendente llegó al cargo dos semanas después del suceso, y tras una denuncia de UGT elaboró el citado documento, que partidos de la oposición como PSOE e IU aprovecharon para criticar la gestión de alcalde, Enrique Moresco, del PP. "La devolución del vehículo no fue a instancia del concejal sino a iniciativa de este jefe de la policía argumentando una serie de artículos legales", subrayaba en su informe.
Unos años antes, en 2000, fue señalado por supuestamente hacer la vista gorda para que se pudiera celebrar un cotillón en el que se cometieron una larga lista de irregularidades, de las que no se le pudo inculpar por falta de pruebas, según recuerda Diario de Cádiz. Con el empresario que organizó la fiesta, Sergio Buhígas, creó una empresa con la intención de construir unas pistas de pádel en El Puerto, para lo que podó árboles de la zona sin permiso, lo que le costó una sanción. Para saber si sus insultos tendrán consecuencias, habrá que esperar.