La lucha sin descanso de las 16 familias que se han quedado sin plaza en el CEIP San José Obrero de Jerez

Duante la semana harán concentraciones en la puerta del centro y se reunirán con el PSOE y con el Ayuntamiento para luchar contra lo que consideran "una injusticia "

La concentración llevada a cabo este lunes en el CEIP San José Obrero de Jerez.

El CEIP San José Obrero de Jerez va a seguir luchando para conseguir una segunda línea de niños de tres años. Este lunes ha llevado a cabo en sus instalaciones una sentada con todos vestidos de negro con el lema "el colegio está luto por la pérdida de nuestra segunda línea de infantil". Niños, profesores y padres iban con globos negros para hacerse oír de nuevo en su protesta.

La semana pasada recibieron la noticia por parte de la Delegación de Educación de Cádiz de la negativa definitiva a esa sgunda línea porque "la planificación no contempla la ampliación de líneas. La solución propuesta es el uso de la línea que ya tienen concedida (con 25 alumnos/as, el máximo permitido antes de dar un desdoble) y reubicar al resto de familias en los centros subsidiarios".

Lejos de rendirse, el comité que ha sido elegido en representación de la comunidad educativa y que representa a padres y madres del alumnado del colegio, profesorado y alumnado que no ha entrado seguirá moviéndose. Para este martes están organizadas una cacerola y una pitada dentro de un programa de acciones que se irán sucediendo a lo largo de la semana para culminar el viernes con una concentración pacífica que incluirá un corte de tráfico en la avenida del colegio.

Además, se están movilizando los padres de los niños que no han conseguido entrar, que ascienden a 16 familias. Este lunes se han reunido con el PSOE y está previsto que a lo largo de la semana hagan lo propio con el Ayuntamiento. Además, todas las mañanas se concentrarán en la puerta del colegio. 

"Vamos a seguir peleando porque después de tener 40 solicitudes nos parece injusto que se quite la segunda línea. Nos dijeron que nuestra hija iba a entrar con seguridad porque había dos líneas y ahora nos encontramos con esto", señala Lucía Márquez.

"Pusimos una segunda opción, pero realmente no cumple con nuestras expectativas. Cuando se habla de la calidad en la enseñaza los padres pensamos que sería más calidad tener dos líneas con 20 niños que una con 25. Que el motivo de quitar la línea sea no pagar a otro docente no nos convence", añade Lucía.

En el caso de que las reclamaciones dieran resultado y Educación accediera a conceder la segunda línea serían 44 niños los que entrarían porque hay cuatro que han pedido como primera opción subsidiaria este centro tras quedar fuera de colegios concertados.