La Navidad es época de muchas cosas. También, de pensar en "regalar" una mascota. Como si fuera un juguete, como si no tuviera sentimientos. Como si no tuviera que ser una decisión muy meditada. Como si no incluyera obligaciones. Y derechos. En estas fechas se regalan, y luego en verano se abandonan muchas mascotas. Es un ciclo que tristemente se repite.
"Como seres vivos que son, los animales tienen una serie de necesidades de alimentación y cuidado, además de una media de vida larga. Una mascota no es un juguete, que una vez que no sirve se abandona", asegura la delegación de Medio Ambiente y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Jerez. El mensaje, con matices, se viene repitiendo por parte de Administraciones y protectoras desde hace décadas. Va calando, aunque cuesta.
Lo saben bien en el centro municipal de protección animal de Jerez —la perrera, para entendernos—, ubicado en el polígono industrial El Portal, donde la ocupación es alta, pero hay mucho movimiento. Los recién llegados pasan distintos chequeos. Los que tienen enfermedades, como precaución, están unos días en el lazareto, para evitar contagiar a otros compañeros.
Un ratonero bodeguero andaluz, muy friolero, está siendo vacunado en el espacio habilitado como consultorio cuando lavozdelsur.es visita las instalaciones, donde una veterinaria le saca sangre. Forma parte del protocolo habitual cuando llega una nueva mascota. Todas son analizadas, desparasitadas y vacunadas. Una vez sean adoptadas, salen esterilizadas y con microchip.
Las mascotas, perdidas o abandonadas, que vagan por las calles de la ciudad acaban en el centro, donde principalmente hay perros y gatos. De vez en cuando, entra algún caballo. Pero también cerdos, ovejas, cabras, cobayas o hurones. Incluso un canguro, el que fue visto por la zona de San José Obrero hace unos meses.
Principalmente, lo dicho, perros y gatos. Hay una colonia que vaga a sus anchas por las instalaciones. Los perros ocupan los cheniles, los habitáculos donde tienen su cama y su comida. Aunque, por turnos, pasan cada día a la zona de esparcimiento, donde tienen terreno para correr y jugar. Además, están en marcha algunas mejoras, como la instalación de lámparas calefactoras en los cheniles y mejoras en las canalizaciones de desagüe del pabellón central.
Hay de todo. Perros pequeños —muchos ratoneros bodegueros—, pero también yorkshire y otras razas de mayor tamaño, como pastor alemán, pastor belga malinois o mastines, por poner algunos ejemplos. Esperando pacientemente a ser adoptados. Esperando para encontrar una familia que los cuide y les dé cariño, tras ser tristemente abandonados, fundamentalmente durante los meses de verano.
Aunque abandonos hay todo el año. En el centro de protección animal de Jerez, cada poco reciben llamadas alertando de que hay animales sin dueño, vagando por calles o campos. Durante 2023, un total de 640 animales fueron rescatados en Jerez. Unos cuantos datos más: 286.000 perros y gatos son abandonados en España cada año —según datos de un estudio de la Fundación Affinity de 2023—. Un 60% son perros y el 40% restante, gatos. La mitad encuentra casa, pero la adopción de perros ha bajado en los últimos años —de un 52% en 2021 al 45% en 2023—.
Otras campañas, como la última de la Real Sociedad Canina, dicen que el 43% de los abandonos se producen en verano, la mayoría por problemas con el carácter (12,3%) o la pérdida de interés de sus dueños (11,6%). "Todas estas razones son injustificables y la cría responsable, planificada y certificada, es la mejor estrategia para atajar estos problemas", dice la entidad.
Pasando de los datos a la realidad: en el centro de protección animal de Jerez los cuidan, pero el objetivo es que encuentren pronto un hogar. "La media de estancia depende de muchas circunstancias, pero los pequeños suelen ser adoptados más rápido", cuenta Fátima Monreal, jefa de departamento de Protección Animal en el Ayuntamiento jerezano. "Los PPP (perros potencialmente peligrosos) requieren licencia, con el coste que conlleva", incide. También seguro y no contar con antecedentes penales.
Cuando una familia entra por la puerta del centro, ya saben si la adopción está cerca o no. Hay quien llega buscando una raza concreta —"según la moda"—, e incluso un color, un tamaño... Normalmente, quien quiere un perro por catálogo, tiene pocas posibilidades de que esa búsqueda fructifique en una adopción responsable. A todo el mundo se le orienta para intentar encontrar a la mascota que mejor encaje con su estilo de vida y con su familia. No siempre es posible.
"Hay veces que se elige por el físico, pero a lo mejor es un perro muy activo, que requiere mucho ejercicio, y no se le puede proporcionar", dice Monreal. "Hay que saber cómo educarlos, porque estás metiendo a un adulto en casa, y eso es lo que hay que hacer entender", agrega. Luego, el centro de protección animal se apoya en las protectoras, que suelen visitar las viviendas de los adoptantes, para comprobar que las mascotas pueden encajar.
Sobre el terreno, Carmen Vilches, veterinaria del centro de protección animal, informa sobre las necesidades del perro en cuestión. Ella se encarga de reconocer a las mascotas que llegan. De curarles heridas, llegado el caso. De diagnosticar si padecen alguna enfermedad. "La mejor medicina es la preventiva", sostiene. Con su labor evita males mayores a los animales, y posibles contagios a otros habitantes del centro. Desde que trabaja en la perrera como interna —antes, se llamaba a un profesional externo cuando había una urgencia—, nota que se detectan antes muchas enfermedades, que los seguimientos a las mascotas mejoran su calidad de vida.
"Hemos querido reforzar la protección animal, porque son uno más de la familia", incide Jaime Espinar, teniente de alcaldesa de Servicios Públicos y Protección Animal, que recuerda las mejoras impulsadas en la perrera, donde hay "mayor limpieza y atención a las mascotas". "Ya no se ven perros callejeros", dice, un logro que achaca también al papel de las protectoras y asociaciones felinas, que dedican su tiempo "de manera altruista". En la app municipal (Jerez smart) hay un apartado con los animales que se pueden adoptar y se ha prohibido la pirotecnia en Navidad. "Queda mucho por hacer, pero seguimos dando pasos", agrega.
Cómo se puede adoptar a un perro o un gato en Jerez
A la hora de adoptar un perro o un gato, cualquier persona interesada se puede dirigir al centro municipal de protección animal y ver los que hay en adopción en ese momento.
Cuando una persona elige a un animal, los servicios municipales evalúan al posible adoptante, y lo asesoran para que elija a la mascota que mejor se adapte a su estilo de vida, su vivienda y su familia.
Los perros tienen que salir adoptados ya esterilizados, debidamente desparasitados externa e internamente, vacunados e identificados con microchip, en el caso de no estarlos, como establece la Ley 11/2003 de 24 de noviembre de Protección de los Animales.
La esterilización de perros y gatos en el caso de los cachorros se llevará a cabo dentro del mes siguiente de haber alcanzado su madurez sexual o desarrollo gonadal. En el caso de que los adoptantes no conozca veterinarios, pueden solicitar un listado de profesionales que colaboran con el centro de protección animal.
Los adoptantes firmarán dos anexos de adopción y preadopción, en los que se comprometen a proporcionar la atención veterinaria que precise el animal y una vida en ambiente de afecto y familiar, así como al cumplimiento del artículo 29 de la Ley 11/2003 de Protección Animal incluyendo la esterilización de los cachorros.
El abandono de mascotas es un delito, incluido en el artículo 337 del Código Penal, que se castiga con penas que van de uno a seis meses y una sanción económica que oscila entre los 2.001 euros y los 30.000 euros.
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