La Policía Nacional ha detenido a un matrimonio propietario de un restaurante de la Axarquía tras haber obligado a tres de sus trabajadores a seguir en el establecimiento sabiendo que estaban contagiados por el covid. Presuntamente, la pareja de origen argentino se aprovechó de que los empleados eran extranjeros en situación irregular, para amenazarles con el despido o con la no remuneración de su jornada si se daban de baja o anunciaban haber dado positivo.
La investigación, que se ha desarrollado en coordinación con la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado dentro de un convenio para luchar contra el empleo irregular, se inició a partir de la denuncia de una de las víctimas. El ciudadano, que no disponía de autorización legal para resider y trabajar en España, alertó a los agentes sobre los abusos que sufría en el bar. Según contó, le habían obligado a trabajar aunque estuviese contagiado de covid.
Sus empleadores, un hombre y su pareja, ambos de 40 años, también había tenido síntomas compatibles con el covid, pero dijeron que se trataba de un resfriado y acondicionaron un botiquín en el local con medicinas antitérmicas para combatir los episodios de fiebre.
A los pocos días de que los regentes ocultaran estar infectados, dos cocineros y un camarero dieron positivo. Sin embargo, al comunicarselo a sus jefes, estos les presionaron para que no dejaran su actividad laboral con amenazas. Según un comunicado de la Policía del que se ha hecho eco diario Sur , uno de los positivos ingresó en la UCI de un hospital al agravarse su estado.
Además, los detenidos no facilitaron mascarillas a sus empleados de la cocina, pero sí a los camareros al estar de cara al público. Esta conducta incívica que dificulta evitar la propagación del virus suponía un riesgo, no obstante, el restaurante continuaba abierto por los regentes, que incluso obligaron a los empleados a aprenderse datos de filiación de terceras personas para que se identificaran como tales ante una posible inspección de Trabajo.
El matrimonio ha sido arrestado por agentes del Grupo II de la UCRIF de la Comisaría Provincial de Málaga y del grupo operativo de extranjeros de la Comisaría Local de Vélez-Málaga por presuntos delitos contra los derechos de los trabajadores, contra la salud pública y falsedad documental.
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