El aumento de la actividad explosiva en Cumbre Vieja de La Palma, que ha conllevado la evacuación de los barrios de Tajuya y Tacande de Arriba y Tacande de Abajo, en El Paso, ha originado la apertura de una nueva boca eruptiva, tal y como han confirmado técnicos del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan).
Esta nueva colada tiene bloques de gran tamaño que podrían asociarse al colapso parcial del centro eruptivo principal, con velocidades que fueron disminuyendo a lo largo de la jornada del jueves desde 33 metros por hora a 12 metros por hora al final del día y continúa su ralentización.
Las personas que han sido evacuadas deben dirigirse al campo de fútbol de El Paso para coordinar el dispositivo. Según recoge el último informe actualizado del Pevolca, la erupción continúa mostrando el mismo estilo eruptivo fisural, con mecanismo estromboliano, en una fisura en dirección noroeste-sureste, y con fases intermitentes de mayor explosividad.
La columna eruptiva ya alcanza una altura de seis kilómetros sobre el nivel mar y se ha constatado que la colada principal (la más antigua) avanza a una velocidad menor a un metro por hora. Para las próximas horas se prevé un giro del viento a alturas comprendidas entre los 3.000 y 5.000 metros, lo que hará desplazar la nube de cenizas hacia el nordeste, evitando así afecciones a la navegación aérea.
Asimismo, se descarta que se produzca lluvia ácida en las próximas 24 horas, que en todo caso, no generaría daños en la vegetación salvo que fuera persistente. La sismicidad continua en bajos niveles, aunque no se descarta la posibilidad de sismicidad sentida y siguen registrándose sismos de tipo largo periodo, asociados a la actividad explosiva.
La señal de tremor volcánico ha aumentado durante las fases explosivas, reflejando la dinámica eruptiva y es posible que las ondas de presión asociadas a la actividad explosiva puedan causar roturas de ventanas en un radio de tres kilómetros alrededor del centro emisor.