El Ingreso Mínimo Vital (IMV) llega este mes a 15.094 hogares gaditanos donde viven 40.571 personas, de las que 14.937 son menores, el 36,81% del total. Así lo ha dado a conocer este domingo la Subdelegación del Gobierno en Cádiz, la provincia con mayor tasa de paro de España, en una nota en la que ha precisado que, de media, cada unidad de convivencia que ha sido reconocida como titular del IMV está formada por 2,69 personas.
El subdelegado del Gobierno en Cádiz, José Pacheco, ha destacado "la importante incidencia que esta prestación está teniendo en la reducción de la pobreza infantil", y ha defendido que "el IMV es el mayor avance social que nuestro país ha experimentado en mucho tiempo". "Garantizar condiciones de vida dignas a sus beneficiarios, especialmente a los menores, es uno de sus grandes objetivos y seguimos avanzando en ello", ha añadido.
Para el subdelegado, "el IMV representa toda una política social, ya que reduce el nivel de pobreza y la exclusión para conseguir una igualdad real de oportunidades sociales y laborales". "A pesar de la complejidad de su tramitación, cada vez está llegando a más personas", ha puesto de relieve además José Pacheco.
Del total de hogares beneficiarios, 9.457 —el 62,65% del total— cuentan con menores. Entre ellos, la nómina de mayo se abonará a 3.803 hogares monoparentales —el 25,19% del total—, y a 5.654 hogares no monoparentales con menores, que suponen el 37,45% del total.
Por edades, de media, los titulares gaditanos del Ingreso Mínimo Vital tienen 44,63 años. El grupo más numeroso son las personas entre los 36 y los 45 años, que superan el 33,6% del total. Centrándose en los beneficiarios, esta edad media desciende hasta los 29,89 años.
Por género, más del 70% de los titulares de la prestación son mujeres, que también son mayoría entre los beneficiarios, con 22.455 mujeres que forman parte de las unidades de convivencia que reciben el Ingreso Mínimo Vital.
La prestación media reconocida a los beneficiarios gaditanos asciende a 423,18 euros al mes, según ha detallado el Gobierno, que ha explicado que el Ingreso Mínimo Vital garantiza un nivel de renta mínimo, cuyo umbral varía en función del tipo de hogar contabilizando los ingresos preexistentes, si existen, con excepción de las rentas mínimas de las comunidades autónomas.
El umbral de renta garantizada oscila entre los 470 euros al mes —el equivalente a una pensión no contributiva— para un hogar unipersonal y los 1.033 euros al mes para unidades de convivencia formadas por dos adultos y tres o más menores o tres adultos y dos o más menores o por cuatro adultos y un menor.
En concreto, hasta el pasado viernes, el INSS ha recibido 57.821 solicitudes válidas en la provincia de Cádiz desde que se puso en marcha la prestación, hace nueve meses. De ellas, 44.270 se han tramitado, lo que supone el 76,56% del total, y 16.222 prestaciones están aprobadas. Otras 784 están en proceso de subsanación.
En su mayoría, las denegaciones se han producido por no cumplir el criterio de vulnerabilidad —al superar los umbrales de renta y patrimonio—, aunque un 10% de las denegaciones se deben a la falta de acreditación de la unidad de convivencia, para lo que en enero se realizó una modificación normativa para que los trabajadores sociales y entidades colaboradoras del Ingreso Mínimo Vital puedan realizar la acreditación y facilitar el reconocimiento de situaciones de convivencia no convencionales, según ha informado la Subdelegación.
Además, el INSS ha puesto a disposición de las comunidades autónomas una pasarela de reconocimiento en bloque, que permite reconocer beneficiarios sin necesidad de presentar la solicitud.
La nómina de mayo que abona la Seguridad Social en el conjunto nacional asciende a unos 195 millones de euros. En toda España son 260.206 las familias a las que se les ha reconocido esta prestación —80.034 en Andalucía—, que suman 682.808 personas —217.692 andaluces—, donde más del 40% son menores; en concreto, 275.953, de los que 86.501 son andaluces, el 31,3%. De media, cada hogar está formado por 2,62 personas.
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